En plena temporada de altas temperaturas, una de las soluciones más simples y refrescantes llega desde la cocina casera. Un helado de kiwi que se prepara con apenas dos ingredientes y en pocos minutos. La propuesta sorprende por su sencillez y por el resultado final, que combina una textura cremosa, un punto ácido y un sabor totalmente natural.
La base es minimalista: kiwi previamente congelado y una cucharada de yogur, que puede sustituirse por chocolate blanco para quienes buscan un toque más dulce. A partir de ahí, la receta se adapta al gusto de cada uno y permite jugar con toppings y variaciones.
Receta del helado de kiwi
Ingredientes
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2 kiwis grandes, pelados y congelados (mínimo 24 horas).
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2 a 3 cucharadas de yogur natural (griego o descremado) o chocolate blanco rallado/derretido.
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Opcional: miel, granola, ralladura de limón, hojas de menta u otro topping.
Cómo se prepara el helado de kiwi paso a paso
El procedimiento es rápido. Basta con retirar los kiwis del freezer, dejarlos reposar uno o dos minutos y rallarlos para obtener una textura similar a la nieve. Para una versión más cremosa, se procesan los trozos de fruta con el yogur hasta lograr una mezcla homogénea. En caso de optar por el chocolate blanco, puede usarse rallado o apenas derretido para integrarlo sin perder frescura. La preparación se sirve de inmediato en copas o conos y admite coronar con menta, miel o granola.
La receta admite variantes según la intensidad del sabor buscado. Quienes prefieran un perfil menos ácido pueden sumar yogur griego y una cucharadita de miel. Para una textura más densa sin necesidad de procesadora, alcanza con mezclar el kiwi rallado con el yogur mientras la fruta sigue bien fría.
Otra opción es combinar kiwi con banana congelada, lo que suaviza la acidez y aporta cremosidad, o sumar chocolate amargo para quienes prefieren un contraste menos dulce.
A diferencia de otros helados caseros, este se disfruta mejor recién hecho. Si se guarda en el freezer, tiende a cristalizar. En caso de almacenarlo, conviene usar un recipiente hermético y dejarlo unos minutos a temperatura ambiente antes de servir.
