Romina Uhrig es una de las participantes más recordadas de la edición de 2022 de Gran Hermano, aquella que terminó con Marcos Ginocchio como el ganador. Una vez fuera de la casa más famosa del país, su fama no amainó y siguió vinculada estrechamente al mundo del espectáculo, algo que trajo sus consecuencias.
Según relató la exdiputada en Infama este último domingo 28 de diciembre, la exposición la llevó a una vida nocturna acompañada del consumo de estupefacientes, lo cual derivó en una adicción a las drogas de la cual pudo salir recientemente.
Romina Uhrig y su adicción a las drogas
"Cuando salimos de la casa, todos salimos con mucha fama y exposición, uno sabe dónde se mete, pero no se imagina las consecuencias de las cosas que te pueden llegar a inventar", explicó primeramente la mediática, para luego señalar que se metió "en el mundo de la noche". "Muchísimas personas del medio que te empiezan a convidar cosas. En el momento decís ‘gracias’ y todo esalegría, no quería que se terminara más la noche, ya pensaba en el finde siguiente”.
"Empecé con pastillas, después tomé MDMA (éxtasis), que se le dice, y nunca me animé a probar nada más, no quería salir si no tenía eso. Buscaba y me ponía agresiva porque lo necesitaba", prosiguió, explicando que tuvo "depresión y ataques de pánico”. "Para mí eso fue fuerte y lamentablemente no lo pude manejar. Y es triste, porque siempre me creí fuerte y pasé por otras cosas feas, pero no lo pude manejar", añadió.
Respecto a cómo pudo recuperarse, mencionó: "Una amiga me recomendó a su psiquiatra, me vieron muy mal y me medicaron. Hoy estoy bien, gracias a Dios pude salir de esa porquería, te lleva a la felicidad, pero después te queda el vacío". Finalmente, dejó un mensaje de gran importancia: "Fue una caída, con mucho dolor. El dolor me llevó a hacer cosas que decidí hacerlas públicas porque hay muchas personas que pasan por esto, demostrarles que uno se puede equivocar, pero también se puede salir".
