Dolor en el fútbol: Murió Daniel Willington, el crack argentino al que acusaban de "jugar en la sombra"

Fue uno de los jugadores más recordados del fútobl argentino en la década del 60, 70 y 80. Con la 10 en la espalda, un hombre alto que desempeñaba un fútbol mental y claro. 

03 de noviembre, 2025 | 18.32

La noticia sorprendió a todo el fútbol argentino. Uno de los mejores jugadores de todo el fútbol del interior, Daniel Willington, falleció a los 83 años este lunes 3 de noviembre. El jugador era recordado por ser uno de los jugadores más emblemáticos de la historia de Talleres de Córdoba, pero además de Vélez.

En este sentido, también hay que sostener que Willington es oriundo de Guadalupe en Santa Fe, pero llegó a Córdoba muy de joven cuando, su papá -que también fue jugador de Talleres-  fichó para el club. Más allá del linaje futbolístico de Willington, lo más trascendental tuvo que ver con todo el recorrido que hizo a lo largo de los años. En Talleres se convirtió en uno de los mejores jugadores de la historia del club y esto lo llevó a tener un traspaso a Vélez en la Ciudad de Buenos Ares. 

Recordado en el fútbol argentino, uno de los comentarios más llamativos sobre el jugador - a lo largo de su historia- es que era un jugador que "jugaba por la sombra". En realidad, de lo que siempre se habló de este crack con la número 10 es que era uno de los mejores jugadores del Fortín y que, en realidad, le achacaban el capricho de jugar siempre en la parte cobijada de la cancha, es decir que evitaba al sol. En este punto, siempre le decían esto por su forma "pachorrienta" de jugar. Alto, de galera y bastón, era lento en los desplazamientos pero tenía una pegada excelene, una puntería increíble y era uno de los hombres mas inteligentes dentro de una cancha de fútobl. 

Nacido el 1 de septiembre de 1942, fue uno de los grandes jugadores del siglo y se ganó el grito de "Y ya lo ve / y ya lo ve / es el famoso Cordobés!”. Principalmente en V;elez Sarsfield. La leyenda del crack llegó principalmente cuando le metió un gol a Belgrano en la final del 21 de agosto de 1974 de la Liga Cordobesa. Tiró zapatazo de tiro libre que se metió de forma impecable en el ángulo izquierdo del arquero Tocalli.

En Vélez, el crack compartió cancha con Carlos Bianchi y conformó uno de las duplas de ataque más recordadas de Vélez Sarsfield. A lo largo de us historia, por otro lado, este elegante número 10 se convirtió en uno de los mejores jugadores de la institución sin duda.