El gobierno de Milei defendió el superávit en base a un nuevo ajuste presupuestario

Los números que explican cómo llegaron al superávit. Los recortes a políticas sociales claves y a las provincias. La contracara de este ajuste, una sociedad que no logra volver a consumir como antes.

18 de junio, 2025 | 18.50

La administración de la Libertad Avanza volvió a profundizar el ajuste del gasto público con la sola intención de mostrarle al poder económico un superávit primario y fiscal basado en un programa de hambre y exclusión. Para defender su causa se valió de algunos propaladores mediáticos, como el ex titular de la empresa Syngenta (también ex asesor de Alberto Fernández), Antonio Aracre, quien bancó el ajuste mileista con la parcial -y hasta falaz- información de un aumento del consumo y disminución de la pobreza.

“Hoy se conocerá el dato que explica la fortaleza de Javier Milei. El desplome de la inflación y de la pobreza. La consistencia de la estabilidad. La baja de 2000 puntos del Riesgo País. Es el superávit, estúpido”, manifestó Aracre a través de su cuenta de X.

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Ajustes

El nivel del gasto general tuvo una caída en mayo del 2,3%, mientras que los ingresos cayeron un 2,4%. De acuerdo al último informe de la Oficina de Presupuesto del Congreso, el programa Volver al Trabajo registró un recorte del 42%, explicado principalmente por el congelamiento del valor de la prestación desde diciembre de 2023. “Desde esa fecha, el poder de compra de la prestación se ha deteriorado en un 60”, indicaron desde el OPC.

En el rubro políticas alimentarias, que incluye la Prestación Alimentar, la merma registrada durante mayo fue del 18,5% interanual. El monto de este instrumento no tuvo alzas desde junio del año pasado. La pérdida de su poder de compra llegó al 22,%.

Según la OPC, la caída total de recursos vinculados a programas llegó al 17,4% en términos reales. “Incidió la falta de ejecución del programa Acompañar y del Programa de asistencia Vouchers Educativos”, concluyó el órgano presupuestario del Congreso. Los subsidios al transporte fue otra de las áreas golpeadas por el programa oficial. Con el aumento de los pasajes del transporte público, la clase trabajadora fue la más perjudicada.

Las transferencias al Fondo Fiduciario del Sistema de Infraestructura del Transporte registraron una merma del 36,4%, a través de las cuales se atienden las compensaciones tarifarias para los pasajeros del AMBA. También hubo un recorte del 8% hacia el Operador Ferroviario S.E.

El ajuste en las provincias

De acuerdo al último informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), sobre los recursos transferidos de manera directa a las provincias, en mayo de 2025 se observó un derrumbe interanual de los Recursos de Origen Nacional de 23,3% en términos reales, mientras que la Coparticipación Federal de Impuestos exhibió una desmejora de 26,2% interanual. “La recaudación por IVA se redujo 1,0% en términos reales y el Impuesto a las Ganancias mostró guarismos muy negativos (-39,8%)”, puede leerse en el informe.

La coparticipación de mayo cayó por una mala recaudación en IVA como consecuencia del freno en el consumo. De los últimos cinco meses, tres exhibieron una reducción del IVA coparticipado, “explicado por un comportamiento errático de la actividad económica y del consumo”, según el informe del CEPA. Los resultados de los primeros cinco meses fueron los siguientes: enero (-0,6), febrero (5,3), marzo (3,7), abril (-1,2) y mayo (-1,0).

Con la caída de la recaudación por IVA y Ganancias, las afectadas fueron el conjunto de las provincias. Todas las jurisdicciones exhibieron decrecimiento en sus RON en términos reales. El promedio del conjunto se situó en -23,3%. 

La caída del consumo

En abril, las cantidades de tickets y operaciones registradas en los supermercados fue de 70 millones, contra las 76 millones registradas hace un año, una merma del 6%. No hay tal reactivación del consumo.

La consultora Focus Market realiza de manera periódica un relevamiento por regiones. En la zona metropolitana, el consumo cayó 1,5% durante mayo, mientras que la facturación se mantuvo sin variación, frente al mes anterior. “En el interior del país, la caída fue del 4,1%, y la facturación otro 2,7% en la comparación mensual”, puede leerse en el informe citado.

También existen diferencias en relación al tipo de comercio, pero siempre dando cuenta de número negativos. El formato de tienda self-Independiente presentó una disminución del consumo de 2,1% ($10.478 de ticket promedio); el autoservicio grande cayó 3,8%, con un ticket promedio de $9.464; para el caso del autoservicio mediano la disminución fue del -4,0% con un ticket promedio de $7.254; y los autoservicio chicos presentaron una merma del 4,2% con un ticket promedio de $6.463.

Estos datos dan cuenta de una fuerte pauperización de los ingresos de los trabajadores y trabajadoras. La administración Milei utiliza el ancla de los salarios para contener la inflación. Esa es la estrategia que se viene aplicando desde el Poder Ejecutivo. En otras palabras, un programa político de hambre.

“El Gobierno apuesta a la intervención o techos a las negociaciones paritarias para limar la puja distributiva y quebrar la inercia inflacionaria. Así lo muestran las últimas no homologaciones en sectores como metalúrgicos, comercio o transporte y los reiterados aumentos por debajo de la inflación a los trabajadores de la administración pública”, puede leerse en el informe “¿El ancla salarial reemplaza al ancla cambiaria?”, publicado por el Centro de Estudios Económicos y Sociales “Scalabrini Ortiz” (CESO).

En este escenario crítico, las familias ya llegaron al límite del endeudamiento de sus tarjetas de crédito utilizadas para la compra de alimento. “En los últimos meses, se elevó la ratio de irregularidad (RI) en los préstamos otorgados a las familias hasta alcanzar el 3,3% en marzo (2,8% en las tarjetas de crédito, 4,1% en los préstamos personales). La irregularidad en los préstamos otorgados por proveedores no financieros de crédito fue del 9,4%”, concluyó otro informe de la consultora Vectorial.