La Justicia federal puso un freno al intento de cierre de la Obra Social del Personal Municipal de Avellaneda (OSPMA), al hacer lugar a una medida cautelar presentada por la entidad. Con esta decisión, queda suspendida la resolución de la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación que buscaba iniciar el proceso de baja de la institución.
La acción de amparo fue presentada el lunes 30 de junio, en medio de un clima de fuerte tensión institucional. Ese mismo día, trabajadores y trabajadoras municipales realizaron una multitudinaria manifestación frente a la sede de la obra social del Sindicato de Trabajadores Municipales de Avellaneda (STMA) en lo que se denominó un "abrazo solidario".
Con el fallo del Juzgado Federal de Quilmes, la obra social del gremio que conduce Hernán Doval garantiza la continuidad de sus servicios y la cobertura a sus afiliados. Desde el Consejo Directivo de la obra social afirmaron que la institución sigue funcionando con total normalidad y destacaron a El Destape que ya comenzaron las gestiones técnicas con las nuevas autoridades nacionales para esclarecer cualquier error administrativo surgido a través del sistema TAD (Trámites a Distancia).
En ese sentido, desmintieron de forma categórica las versiones que apuntaban a una supuesta situación de quiebra de la obra social. “Es mentira. OSPMA tiene superávit en sus balances y todas sus cuentas al día. No entendemos aún la intencionalidad ni la motivación detrás de estas versiones falsas”, aseguraron desde la conducción de la entidad.
La resolución de la Superintendencia que quedó sin efecto había generado alarma entre los trabajadores municipales, quienes dependen del servicio de salud que brinda OSPMA. “Llevamos tranquilidad a nuestras afiliadas y afiliados: la obra social sigue funcionando como siempre, con sus prestaciones garantizadas”, concluye el comunicado difundido por OSPMA tras conocerse la resolución judicial.
En el medio de estas protestas, la Superintendencia cambió de titular. Hace una semana se oficializó la renuncia de Gabriel Oriolo y en su reemplazo asumió Claudio Stivelman, médico egresado de la Universidad de Buenos Aires (UBA).