La provincia de Salta es conocida por sus paisajes montañosos, su gastronomía local y el ambiente festivo de las peñas. Sin embargo, para amantes del misterio también existe una localidad que se aleja del turismo habitual: un pueblo fantasma con una apasionante historiia.
Se trata de La Casualidad, un pueblo ubicado en medio del desierto salteño. Ubicado en el departamento de Los Andes, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar, este asentamiento fantasma se alza a unos 30 km del límite con Chile y a 25 km del majestuoso volcán Llullaillaco.
En su auge, La Casualidad fue un centro minero activo: más de 3.000 personas vivían allí, trabajando en una de las minas de azufre más importantes de la Argentina. Con escuelas, viviendas, almacenes y servicios completos, el pueblo mostró vida plena hasta que, ante el declive de la actividad minera en los años setenta, quedó abandonado. Hoy, sus galpones, vías de ferrocarril, ladrillos medio destruidos y restos dispersos dan testimonio de esa era pasada.
Lo que hace especialmente atractivo a La Casualidad para fotógrafos y exploradores es su entorno: tierras áridas, salinas, cerros rojizos, cielos de azul profundo, y ese contraste casi surrealista entre lo natural y lo humano abandonado. El clima es seco, las temperaturas extremas, pero la luz, la soledad y las ruinas crean un escenario ideal para capturar imágenes únicas.
Cómo llegar a La Casualidad desde Salta capital
El acceso no es sencillo: desde la ciudad de Salta capital hay que recorrer aproximadamente 500 km. El camino incluye la Ruta Nacional 51 hasta San Antonio de los Cobres, y luego rutas de ripio y desierto que requieren vehículo 4×4 y preferiblemente acompañamiento de guía local. Además, debido a la altitud y a la falta de servicios, se recomienda llevar abrigo, provisiones y estar preparado para lo remoto.
