Incorporar más verduras a la dieta diaria es uno de los mayores desafíos de las personas, sobre todo en invierno, cuando el clima frío es más propicio para consumir comidas calóricas. Sin embargo, existe una ensalada viral de zanahoria que no solo tiene un sabor delicioso, sino que también sirve para incorporar más verduras a la dieta diaria.
Se trata de una receta con toques orientales que ya está recorriendo todas las redes sociales debido a que es muy rica y se puede preparar con ingredientes que tranquilamente se tengan en las casas. La zanahoria es el ingrediente principal, pero su diferencial es la forma en la que está cortada y la mezcla de condimentos que se les pone.
Primero hay que empezar pelando dos zanahorias grandes y rallarlas en tiras finas, esto se puede hacer con un pelapapas o con una mandolina para lograr esta forma como si fueran "fideos gruesos". Una vez que se tiene esta base, queda preparar el aderezo que es la estrella de la ensalada.
En un bowl aparte mezclar miel, vinagre de manzana, salsa de soja y jugo de limón y revolver hasta que se disuelva la miel. Luego, sumarle el aceite de tu preferencia e incorporar todo junto a la zanahoria. Para finalizar, se le puede sumar cilantro picado y semillas para aportarle frescura y un toque crocante.
El truco casero y sencillo para limpiar las frutas y verduras
Antes de preparar cualquier ensalada, es importante que las verduras estén bien limpias y desinfectadas. Es por este motivo que cada vez son más los hogares que adoptan un truco casero, simple pero efectivo para limpiar las frutas: la mezcla de agua con sal. Esta técnica, que ganó popularidad en redes sociales, permite detectar la presencia de larvas de moscas.
"Sumergir las frutas en agua con sal ayuda a identificar si hay larvas en su interior", explicaron los especialistas. Esto sucede porque los insectos suelen dejar sus huevos en la superficie de las frutas, donde luego se desarrollan. Sin embargo, los expertos aclararon que estas larvas son inocuas para la salud.
A la hora de limpiar frutas de cáscara dura, como las manzanas, se recomienda simplemente lavarlas bajo el agua. "Los expertos aconsejan pelarlas antes de consumirlas para mayor seguridad", aseguraron. Para llevar a cabo una limpieza correcta, el primer paso fue enjuagar las frutas durante al menos 30 segundos bajo el agua de la canilla, utilizando un cepillo blando o frotando entre las manos.
Después, hay que secarlas bien con una toalla de papel o un paño limpio antes de guardarlas en el frutero. Para frutas de cáscara más delicada, como peras, frutillas o ciruelas, se necesita un cuidado adicional. "Es recomendable lavarlas con agua corriente, sumergirlas en agua potable con unas gotas de lavandina y enjuagarlas bien", indicaron los expertos, similar a cómo se hace con las verduras, para asegurar su seguridad.