Las achuras son una pieza fundamental del asado argentino: más allá de los cortes tradicionales de res, hay ciertas partes internas de la vaca que son elegidas para sumar a la parrilla como un aperitivo previo a la comilona. Riñón, chinchulín, corazón, son algunas de las opciones elegidas, pero hay una achura "olvidada" que cuesta solo $1300 y no queda para nada chiclosa.
Se trata de la tripa gorda, achura que corresponde porción terminal del intestino grueso de la vaca. Su historia se remonta a los primeros criadores y parrilleros que buscaban aprovechar al máximo cada parte del animal, por eso empezaron a sumar este corte al tradicional asado y lograron hacer historia. Sin embargo, al día de hoy ya no es una de las más elegidas pese a que su precio es bastante accesible.
A diferencia de otras achuras que en caso de cocinarse mal quedan chiclosas, este corte destaca por su textura crocante por fuera y jugosa por dentro. Su textura hace posible que, a la hora de cocinarse, pueda absorber los sabores sin secarse de más o quedar con una textura extraña.
Más allá de su sabor, lo que más destaca de esta achura es su precio: con un precio base de $2000 por kilo, se trata de una opción accesible de por si. Sin embargo, si a eso se le suma el descuento para quienes utilizan Cuenta DNI, la billetera virtual del Banco Provincia, pueden aprovechar un descuento del 35% que se aplica en locales del rubro, logrando conseguirla por apenas $1.300.
Cómo cocinar la tripa gorda a la parrilla para que quede perfecta
Expertos parrilleros coinciden en que la clave está en el tiempo de cocción y la preparación previa. A diferencia de otros cortes, la tripa gorda necesita paciencia, un fuego moderado y algunos trucos que marcan la diferencia.
Antes de llevarla a la parrilla, se recomienda lavar muy bien la tripa gorda y quitar el exceso de grasa. Algunos cocineros aconsejan hervirla entre 20 y 30 minutos en agua con sal gruesa y un toque de limón o vinagre. Esto no solo ayuda a limpiarla mejor, sino también a ablandarla y sellar los jugos.
La tripa gorda debe cocinarse a fuego medio-bajo y con paciencia, entre 40 minutos y 1 hora, dándole vuelta varias veces para lograr una cocción pareja. El truco está en no apurarla: si el fuego es demasiado fuerte, se dorará por fuera pero quedará gomosa por dentro. Un tip infalible es pincharla suavemente con un tenedor para que largue parte de la grasa durante la cocción y quede más liviana y crocante.