Lograr que la casa huela bien es uno de los mayores objetivos para los amantes de la limpieza, ya que genera una sensación agradable tanto para los habitantes como para las visitas. Para estos casos, los difusores de aromas son una gran opción, pero para potenciar su función pueden colocarse en puntos estratégicos.
Además de brindar un aroma agradable al hogar, los difusores ayudan a la decoración, ya que son bastante estéticos. Desafortunadamente, este es un elemento que no tiene mucho alcance, por eso es necesario colocar varios en puntos estratégicos de la casa para lograr que el aroma se disperse bien.
Otro tip a tener en cuenta es que lo mejor es tener varios difusores pero de un mismo aroma, ya que de esta forma se unificarán los olores y se generará una "identidad" olfativa en la casa. O bien, se pueden poner diferentes olores que combinen bien y que tengan sentido en el espacio en el que están ubicados.
Dónde colocar los difusores en la casa
1. Entrada del hogar: Colocar un difusor en el recibidor ofrece una bienvenida perfumada tanto para los residentes como para las visitas. Fragancias frescas y neutras, como cítricos o lavanda, son ideales para este espacio.
2. Baño: Es esencial mantener este espacio con un aroma limpio y agradable. Aromas como eucalipto, menta o algodón aportan una sensación continua de frescura.
3. Dormitorio: Para promover la relajación y el descanso, se recomienda ubicar un difusor cerca de la mesita de luz o en una cómoda. Notas como lavanda, vainilla o sándalo ayudan a relajar la mente y facilitar el sueño.
4. Living: Al ser una zona social, un buen aroma en el living puede marcar la diferencia. Colocar un difusor cerca del sillón con fragancias amaderadas, florales o especiadas crea un ambiente acogedor sin ser invasivo.
5. Pasillos: Aunque suelen ser áreas de paso, los pasillos pueden beneficiarse de un difusor para dispersar sutilmente el aroma por el hogar. Fragancias como té blanco o jazmín son apropiadas para estos espacios.
6. Cocina: Si bien es un lugar con diversos olores, un difusor con aromas cítricos como limón o bergamota puede neutralizar olores sin interferir con los de la comida.
7. Placard: Para mantener la ropa con un aroma fresco, colocar un difusor dentro del armario es una excelente opción.
Cada cuánto hay que cambiar las sábanas de la cama: cuál es la mejor recomendación
Muchos olvidan o no tienen en cuenta la verdadera importancia de cambiar las sábanas, pero este hábito es clave en la limpieza del hogar y fundamentalmente en el cuidado de la salud. ¿Cada cuánto tiempo hay que cambiar las sábanas de la cama?
La frecuencia del cambio de sábanas influye directamente en la salud y estética de nuestra piel y pelo. Un equipo de especialistas analizó específicamente cuál es la frecuencia ideal para cambiar la ropa de cama, cuál es el mejor método para lavarla y garantizar un entorno de descanso óptimo y libre de bacterias y ácaros.
Un estudio reciente encabezado por Phillip Tierno, microbiólogo de la Universidad de Nueva York, determinó que las sábanas se deben lavar o cambiar por lo menos una vez a la semana. La limpieza es más importante en verano, cuando las temperaturas suben y el cuerpo transpira más de lo habitual, pero durante el invierno también se deben lavar con frecuencia, ya que el organismo desprende piel muerta en cualquier época del año y se pueden agravar alergias y congestiones.
Lo mismo ocurre con las almohadas, almohadones, edredones, acolchados, mantas y cualquier tipo de ropa de cama que deberías también lavarlas cada 7 días.