El huevo es uno de los alimentos más versátiles y consumidos del mundo. Rico en proteínas, grasas saludables, vitaminas A, D, B y minerales como fósforo, yodo y selenio, se ha ganado un lugar indiscutido en la cocina diaria. Sin embargo, a la hora de elegir en la góndola del supermercado, muchos se preguntan: ¿hay diferencias reales entre el huevo blanco y el colorado?
La respuesta corta es no, al menos en términos nutricionales. Según explican especialistas y organismos como la Fundación Española de Nutrición (FEN), ambos tipos de huevo tienen un valor alimenticio prácticamente idéntico. “Son una fuente de luteína y zeaxantina, dos antioxidantes clave para la salud ocular”, señala la nutricionista María Jesús Zepeda.
Por qué los huevos tienen distinto color
La diferencia más visible, el color del cascarón, se debe a la raza de la gallina. Las aves de plumas blancas y lóbulos auriculares claros suelen poner huevos blancos, mientras que las de plumas rojizas y lóbulos oscuros producen huevos colorados. Pero este aspecto externo no incide en su sabor ni en su calidad.También existe la creencia de que los huevos colorados tienen una cáscara más gruesa. Sin embargo, esto depende de la edad de la gallina: cuanto más joven es el ave, más gruesa será la cáscara, sin importar el color.
Otro dato curioso es que las gallinas jóvenes producen huevos con yemas más grandes y claras más pequeñas, mientras que en las gallinas adultas ocurre lo contrario. Y si hay alguna variación en el sabor, la textura o el color de la yema, esta se relaciona directamente con la alimentación del animal, no con el tipo de huevo.
En lo que sí puede haber una diferencia es en el precio. Los huevos blancos suelen ser más caros que los colorados, aunque en algunos mercados ocurre lo contrario. “Puede ser que los costos asociados a la mantención de las gallinas rojizas, su alimentación y el tamaño que tienen, hagan que el huevo de color sea un poco más caro”, explica la nutricionista Evelyn Sánchez, de la Universidad de Las Américas.
El motivo por el que los huevos no deben guardarse en la puerta de la heladera
Todas las heladeras tienen en su interior, casi siempre en la puerta, algunas bandejar para acomodar los huevos. Sin embargo, quienes conocen de gastronomía aseguran que esta no es la mejor opción para conservarlos. Al parecer, una vez que los huevos están en casa deben ser muy cuidados para que su integridad no se dañe, que no se rompa la cáscara y que su interior no quede expuesto a ninguna sustancia, partícula o insecto que ande rondando.
El debate se dio en la red social X (ex Twitter), cuando una usuaria llamada Teconanita, escribió: "La primera heladera que compro en mi vida". En la imagen, se podía apreciar un enorme electrodoméstico con una gran caja para guardar las verduras en la inferior y un amplio espacio para colocar hasta más de un maple de huevos. A raíz de esto, muchos usarios comenzaron a dar los motivos por los cuales no se aconseja guardar los huevos allí.
El motivo principal tiene que ver con un cambio de ambiente que se produce al abrir la puerta. "Allí se encuentran muy expuestos a los cambios de temperatura cada vez que se abre. Se recomienda guardarlos en la zona más fría y aislada de la heladera", aseguraron desde la cuenta oficial de Info Alimentos. Un ejemplo claro es que cuando se humede la capa de los huevos se pueden dañar por la contaminación exterior y es probable que se deteriore tanto la yema como también la clara.
Entonces, expertos aconsejan que los huevos tienen que ser colocados en recipientes herméticos para que no tengan contacto con los demás alimentos que se guardan en la heladera. Ya que los mismos llegan sucios desde la granja y lavarlos tampoco es una opción recomendada porque raspar la cáscara para eliminar impurezas o rastros de tierra puede dañarlos.