La serie coreana sobre el destino que es furor en Netflix y tiene 16 capítulos

Un nuevo K-drama conquista Netflix con una historia de destino, reencuentros y segundas oportunidades en 16 episodios.

08 de noviembre, 2025 | 19.17

Las series coreanas siguen conquistando al público de todo el mundo, y Netflix vuelve a demostrar por qué son un fenómeno global. Su nuevo éxito, Amor en la puerta de al lado, combina romance, nostalgia y segundas oportunidades en una historia que ya se posiciona entre las más vistas de la plataforma.

El K-drama, compuesto por 16 episodios, sigue la vida de Bae Seok-ryu (Jung So-min), una mujer que, tras un revés personal y profesional, decide regresar a Corea en busca de un nuevo comienzo. Pero el destino tiene otros planes: su nuevo vecino resulta ser Choi Seung-hyo (Jung Hae-in), su amor de la juventud, aquel que quedó en el pasado entre promesas incumplidas y silencios que todavía duelen.

Desde ese reencuentro, Amor en la puerta de al lado se convierte en una historia de emociones contenidas, segundas oportunidades y vínculos que el tiempo nunca logra borrar. Con una dirección delicada y un guion que mezcla humor, melancolía y deseo de redención, la serie invita a reflexionar sobre cómo el pasado puede seguir tocando a nuestra puerta.

Las claves de Amor en la puerta de al lado

El sello visual característico de los K-dramas está presente: planos cuidados, colores cálidos, una banda sonora envolvente y una química innegable entre sus protagonistas. Jung So-min y Jung Hae-in construyen una relación llena de matices, donde los silencios dicen tanto como las palabras.

Amor en la puerta de al lado no solo es un romance, sino una historia sobre el crecimiento emocional, el perdón y la posibilidad de volver a amar sin miedo. Una propuesta ideal para quienes disfrutan de las historias que se desarrollan lentamente, donde cada mirada y cada recuerdo tienen peso propio.

Amor en la puerta de al lado (Love next door) es el nuevo K-drama furor en Netflix.

Con esta serie, Netflix continúa apostando por producciones coreanas que combinan profundidad emocional y calidad cinematográfica. Y como suele pasar con los grandes K-dramas, es difícil verla sin dejar que el corazón se quede esperando un episodio más.