Cómo hacer sopaipillas caseras: receta fácil y rápida en 5 pasos

Te mostramos cómo preparar sopaipillas caseras con zapallo. Una receta fácil con todos los secretos para que te queden perfectas.

28 de octubre, 2025 | 14.39

Las sopaipillas son uno de esos clásicos que trascienden generaciones. Conocidas en Argentina como tortas fritas, estas delicias de masa frita representan la esencia de la cocina casera y familiar. Si querés aprender a prepararlas de manera simple, esta guía de Paulina Cocina te lleva de la mano paso a paso.

Ingredientes para unas sopaipillas perfectas

Para aproximadamente 12 unidades necesitás:

  • 2 tazas de harina de trigo

  • 1/2 taza de puré de calabaza o zapallo cocido

  • 1 cucharadita de sal

  • Agua tibia (aproximadamente 1/2 taza)

  • Aceite para freír

  • Azúcar para espolvorear (opcional)

El proceso: simple y con trucos caseros

Paso 1: preparar la masa
En un bol grande, mezclá la harina con la sal. Agregá el puré de zapallo y comenzá a integrar. Incorporá el agua tibia de a poco, amasando hasta lograr una textura suave y homogénea. La cantidad exacta de agua puede variar, así que andá observando la consistencia.

Paso 2: el reposo que hace la diferencia
Una vez que la masa está uniforme, dale un breve amasado sobre una superficie enharinada. Cubrila con un repasador y dejá reposar durante 30 minutos como mínimo. Este tiempo permite que el gluten se relaje y garantiza una textura más tierna.

Paso 3: dar forma a las sopaipillas
Pasado el reposo, estirá la masa hasta lograr un grosor de aproximadamente 1/2 centímetro. Usá un cortapasta o simplemente un vaso para formar círculos. Tradicionalmente se hacen de unos 10 cm de diámetro, pero el tamaño es a gusto.

Paso 4: el momento de la fritura
Calentá abundante aceite en una sartén a fuego medio. La temperatura ideal es cuando al echar un pequeño trozo de masa, sube burbujeando a la superficie. Freí las sopaipillas por tandas, dándoles vuelta cuando estén doradas del primer lado.

Paso 5: el toque final
Retirá las sopaipillas del aceite y colocálas sobre papel absorbente. Espolvorealas con azúcar si preferís la versión dulce, aunque también son deliciosas solas.

Es importante dejar reposar la masa por media hora.

Secretos para que queden increíbles

El puré de zapallo es fundamental: asegurate de que esté bien cocido y pisado, sin grumos. Si te queda muy húmedo, podés ajustar la cantidad de harina. La masa debe ser blanda pero no pegajosa.

Respetar el tiempo de reposo es clave para que las sopaipillas queden esponjosas por dentro. Si el aceite está muy caliente, se dorarán rápido por fuera pero quedarán crudas por dentro. Mejor fuego medio y paciencia.

Variantes para probar

Si no tenés zapallo, podés prepararlas solo con harina y agua, aunque el sabor y color serán diferentes. Para una versión más rústica, añadí una cucharadita de anís en grano a la masa.

Las sopaipillas son ideales para disfrutar en días de lluvia, como merienda o para compartir con amigos. Su preparación es tan sencilla que una vez que le agarres la mano, se convertirán en un recurso frecuente en tu cocina.