Desde hace un tiempo, las paltas se convirtieron en una especie de "lujo" cotidiano ya que forman parte del desayuno, de algunas ensaladas y hasta de platos más sencillos. Sin embargo, su precio es cada vez más alto y eso obliga a conservarlas lo más que se pueda. Para ello, existen varios trucos que evitan que se pongan oscuras o blandas.
Cuáles son los trucos para conservar la palta por más tiempo
Uno de los métodos más populares es el jugo de limón ya que su acidez actúa como una barrera natural contra la oxidación y mantiene la pulpa verde durante más tiempo. La forma más sencilla de hacerlo es rociar apenitas la superficie expuesta. En caso de que las paltas ya estén abiertas, se recomienda dejar el carozo porque ocupa espacio, reduce el contacto con el oxígeno y retrasa su deterioro.
Otra técnica súper efectiva es envolver las paltas, cortada o nueva, con film adherente, para que el plástico quede en contacto directo con la pulpa. Esto limita el ingreso de aire conservando su frescura por más días. Algunas personas también optan por guardarla en un recipiente hermético.
Un tip que se volvió muy popular en el último tiempo (a través de las redes sociales) es guardar la palta junto a una cebolla cortada. Según los expertos, el azufre que libera la cebolla frena la oxidación de la palta. Por último, guardar las paltas maduras en la heladera también retrasa su proceso natural de ablandamiento. En caso de estar cortada, refrigerarla puede mantenerla en buenas condiciones por algunos días.
Con estos métodos caseros, fáciles y económicos, es posible conservar la palta en medio de un contexto económico difícil y hacerla rendir en diferentes comidas.
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