Increíble hallazgo de un tesoro robado por los nazis hace más de 80 años

Las obras florales fueron encontradas en una subasta en Estados Unidos y podrían ser devueltas a sus herederos originales.

26 de septiembre, 2025 | 17.08

La historia de los robos de los nazis durante la Segunda Guerra Mundial tuvo un nuevo capítulo con el descubrimiento en Estados Unidos de dos pinturas florales del reconocido artista holandés Ambrosius Bosschaert (1573-1621), famoso por sus naturalezas muertas. Las obras fueron encontradas en una subasta por la organización Monuments Men and Women Foundation, dedicada a la recuperación de piezas confiscadas por el régimen nazi.

El sorprendente hallazgo se hizo tras pocas semanas después de que en Mar del Plata se recuperara el Retrato de una dama de Giuseppe Vittore Ghislandi, también perteneciente a una familia judía víctima del despojo nazi. En este caso, las piezas ubicadas en Estados Unidos habrían pertenecido lal patrimonio de Adolphe Schloss (1842-1910) y Lucie Haas Schloss (1858-1938), un matrimonio franco-alemán de origen judío cuya pinacoteca fue desmantelada en París tras la caída de Francia en 1940.

El portal Artnet explicó que Robert Edsel, fundador de la fundación sin fines de lucro, viajó a Newark a principios de septiembre tras recibir un aviso de que las pinturas habían sido puestas en venta. Una vez en el lugar, Edsel “se convenció rápidamente de que las obras se encontraban entre las 333 que pertenecieron a Schloss”, colección que reunía a destacados maestros flamencos y holandeses de los siglos XVI y XVII. “Si se comprueba la autenticidad, las pinturas serán restituidas a los herederos”, precisó la fundación.

La historia de los saqueos a la familia Schloss

Los robos a la familia Schloss se extendieron durante décadas. En julio de 1940, tras la ocupación alemana de París, la casa familiar fue una de las allanadas por las tropas de Hitler y se produjo el primer robo de piezas. Pese a ello, buena parte de la colección  no fue encontrada en ese momento, ya que los hijos de los Schloss habían trasladado decenas de obras a una "zona libre" de Francia, en un castillo ubicado a 480 kilómetros al sur de la capital. Los nazis no tardaron en encontrar el refugio y en los años posteriores se robó la mayor parte del patrimonio de arte, que terminó en el mercado negro o en manos de coleccionistas vinculados al Tercer Reich.