Este domingo, Alpine mostró una de sus peores facetas en el GP de Hungría con las dos detenciones que tuvo Franco Colapinto para los cambios de neumáticos, una tarea que a los mecánicos les llevó mucho más tiempo del debido. En el primer paso por boxes, el pilarense estuvo alrededor de 11 segundos detenido hasta que pudo volver a la pista, mientras que en la segunda fue de 7.2 segundos, lo que suma una pérdida de casi veinte segundos.
En la Fórmula 1, una detención así de ineficiente es crucial en los resultados, ya que cada parada suele durar entre dos y tres segundos cuando se realiza bien e incluso hay registros más bajos, como el de McLaren, que este domingo llegó a los 1.9 segundos con Lando Norris. Esto hace que surja la pregunta de qué sucedió con Alpine en el Hungaroring y cómo debieron haber sido las cosas para evitar este inconveniente que dejó al piloto argentino en el penúltimo lugar.
Si bien Alpine no hizo ningún informe de lo sucedido con los ingresos a boxes de Colapinto, se puede ver que los problemas estuvieron del lado derecho al momento de asegurar el neumático nuevo. En este sentido, serían cuatro los responsables por lo sucedido en Budapest, ya que por cada parada de boxes se involucran entre 22 y 25 mecánicos, tres dispuestos en cada rueda del monoplaza.
El primero de ellos en accionar es el que tiene la pistola neumática para aflojar la tuerca, de manera que su compañero pueda retirar rápidamente la rueda para que el tercero coloque el repuesto, momento en el que cual el primero vuelve a usar la pistola para ajustar. Por lo tanto, hay un total de 12 mecánicos asignados a las ruedas, mientras que el resto tiene otras funciones diferentes.
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Dos se encargan de tener el gato para levantar el coche, uno por el alerón delantero y el otro por la zona del difusor, además de que otros dos tienen gatos de emergencia ante un eventual problema. También hay otros mecánicos que se encargan de hacer las señas para que el piloto se detenga en la posición correcta y que, en caso de algún mal posicionamiento, acomodan el coche para estabilizarlo.
El proceso debe hacerse a la perfección, ya que puede llegar a definir campeonatos al igual que una buena estrategia, motivo por el que los mecánicos siguen un riguroso entrenamiento para cumplir con su trabajo. No solo se trata de trabajar el cuerpo, sino también los reflejos y cada jueves de Gran Premio se realiza una extensa jornada de prácticas para ellos con los coches detenidos.
El posteo de Alpine para los mecánicos
A través de sus redes sociales, Alpine subió un video de la desazón de los mecánicos por su lamentable performance en el GP de Hungría, donde se los ve preocupados y decepcionados por su rendimiento con el coche de Franco Colapinto. “Una forma decepcionante de terminar antes de las vacaciones de verano”, escribieron en la cuenta de Instagram del equipo galo junto a las imágenes de los mecánicos.
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