Neymar ha hablado sobre el impacto que Diego Armando Maradona tuvo en su carrera tras conocerlo en su infancia, pero su intento de emular la "Mano de Dios" del fallecido astro argentino le salió mal el domingo, cuando fue expulsado en el que podría ser su último partido con el Santos.
Cuando el Santos y el Botafogo empataban a 0-0 en el último cuarto de hora de su partido por la liga brasileña de fútbol, Neymar se lanzó a capturar un rebote en el área y envió el balón a la red con la mano.
El brasileño fue rápidamente rodeado por los furiosos jugadores del Botafogo antes de que el árbitro le mostrase la segunda tarjeta amarilla, interrumpiendo su primera titularidad con el club desde que regresó de una lesión el mes pasado.
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Para colmo de males, el Botafogo marcó a falta de cuatro minutos para el final del encuentro y se adjudicó la victoria por 1-0.
El exatacante del Barcelona y del París Saint Germain, de 33 años, pidió disculpas a su equipo y a los aficionados.
"Cometí un error, ¡perdónenme!", publicó en las redes sociales.
"Hoy, si no me hubiesen expulsado, estoy seguro de que habríamos conseguido los tres puntos. ¡Esos tres puntos, los pueden poner en mi cuenta!".
Neymar regresó en enero al Santos, el club de su infancia, tras su paso por el Al-Hilal de Arabia Saudita, y su contrato con el equipo brasileño expiraba el 30 de junio.
La tarjeta roja le impide disputar el partido del jueves contra el Fortaleza, por lo que sólo podrá volver a jugar con el club si amplía su contrato antes de la reanudación de la liga en julio, tras el Mundial de Clubes.
El Santos ocupa el puesto 18 en la liga, con siete derrotas en once partidos.
Con información de Reuters