Ousmane Dembelé, figura del Paris Saint-Germain (PSG) y exestrella del FC Barcelona, lleva casi tres años casado con una mujer de la que poco se sabe. Es Rima Edbouche, una influencer que optó por llevar una vida discreta, lejos del espectáculo y de la exposición que suele rodear al mundo del fútbol.
La vida de ella es un verdadero misterio. Incluso su lugar y fecha de nacimiento exactos siguen sin confirmarse de manera oficial. Algunos medios aseguran que nació en 1999, en Castelfranco Veneto, Italia, hija de padres marroquíes. Otros, como el diario The Sun, afirman que sus orígenes están en Douar Agbalou, un pequeño pueblo del suroeste de Marruecos.
Lo cierto es que su perfil bajo y su escasa presencia en redes sociales contrastan con la tendencia habitual entre las parejas de futbolistas. A pesar de haber sido una influencer muy activa en TikTok, en la que llegó a acumular más de 300.000 seguidores y 3,3 millones de "me gusta", su cuenta ya no está disponible.
Uno de los detalles más llamativos de su contenido era que casi nunca mostraba su rostro. En paralelo, lanzó su propia marca de moda, llamada Razalae, que mantiene vigente a través de una cuenta de Instagram. Sin embargo, publica con poca frecuencia.
Una historia de amor discreta… y repentina para el mundo
Dembelé y Rima se conocieron cuando el futbolista jugaba en el Rennes, en Francia. Desde entonces mantuvieron una relación tan reservada que ni siquiera sus compañeros en el Barcelona sabían que estaba en pareja. La noticia de su casamiento sorprendió al entorno deportivo y a los fanáticos: fue difundido recién cuando empezaron a circular fotos de la ceremonia, que se realizó el 24 de diciembre de 2021.
El evento fue una celebración tradicional marroquí, íntima y familiar, a la que asistieron algunos amigos cercanos del futbolista, como Dayot Upamecano, defensor del Bayern Múnich, y excolegas del club catalán.
Familia, bajo perfil y un nuevo enfoque en la carrera
El 16 de septiembre de 2022, Rima y Ousmane fueron padres de una nena nacida en Barcelona. El nombre no fue revelado de manera pública. Fieles a su estilo, la pareja mantiene una presencia limitada en redes sociales, sin exponer momentos íntimos o familiares.
Lo que sí trascendió fue el impacto positivo que tuvo el matrimonio en la vida de Dembelé. El delantero francés, que antes era conocido por su irregularidad y problemas de disciplina —como pasar horas jugando videojuegos—, mostró un cambio radical desde que se casó. Se volvió más enfocado, maduro y profesional, consolidándose como pieza clave primero en el Barça y ahora en el PSG.
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