La FIFA reveló a las mascotas del Mundial 2026 y lo hizo con un gesto que subraya la esencia del torneo: pluralidad, identidad y unión continental. Por primera vez en la historia, el campeonato se disputará en tres países -Estados Unidos, México y Canadá- y también por primera vez cada uno tendrá a su propio representante animado.
Maple, Zayu y Clutch llegan para continuar una tradición que empezó en Inglaterra 1966 con el legendario Willie, el león británico. Desde entonces, las mascotas condensan símbolos nacionales y la sensibilidad cultural de cada sede. Esta edición no es la excepción.
Maple, Zayu y Clutch, las mascotas del Mundial 2026: quiénes son y qué representan
Maple, el alce canadiense que ataja y celebra la diversidad
Es el embajador de Canadá. Un alce con guantes de arquero, amante del arte, la música y los viajes. Según la FIFA, su misión es recorrer cada rincón del país para conectar con la gente y mostrar la diversidad cultural canadiense. Una figura amable pero firme, símbolo de un territorio que combina naturaleza imponente con ciudades vibrantes.
Zayu, el jaguar mexicano que mezcla fútbol, herencia y fiesta
Representa a México y su elección está cargada de sentido: el jaguar es uno de los animales más emblemáticos de la identidad mesoamericana. Su nombre alude a unidad, fortaleza y alegría. Dentro de la cancha, Zayu es delantero; fuera de ella, difunde gastronomía, baile, arte popular y la enorme biodiversidad mexicana. Un guiño directo a la potencia cultural del país.
Clutch, el águila estadounidense que invita a “volar alto”
Es el símbolo de Estados Unidos. Un águila -animal nacional por excelencia- que juega de mediocampista, viaja por todo el país y conecta comunidades. La FIFA lo presenta como un ejemplo de voluntad, pasión y esfuerzo, atributos que históricamente forman parte de la narrativa estadounidense en el deporte y en su cultura pop.
Una tradición que atraviesa generaciones
Desde Juanito en México 1970 hasta La’eeb en Qatar 2022, las mascotas mundialistas acompañaron cambios políticos, modas y nuevas maneras de comunicar. Estas figuras pasaron de ser simples peluches a convertirse en emblemas culturales reconocibles, incluso para quienes no miran fútbol.
Ahora, Maple, Zayu y Clutch buscan insertarse en esa línea histórica. La apuesta de la FIFA es clara: reflejar identidad nacional sin perder la idea de unidad continental, una narrativa que encaja con la era de megaeventos globales y audiencias fragmentadas.
