Los salarios de los docentes universitarios perdieron un 87% de su poder adquisitivo desde que asumió el presidente Javier Milei, de acuerdo al Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav). El informe remarcó que los educadores del nivel superior necesitan un aumento de salarios del 40% para recuperar el poder de compra.
Los puntos centrales del ajuste contra los docentes universitarios
Brecha salarial-inflación
- Los salarios docentes aumentaron solo 120% desde diciembre de 2023.
- La inflación general acumulada alcanzó 205% en el mismo período.
- Resultado: Una pérdida del 87% en capacidad de compra.
Aumentos estratosféricos en bienes y servicios esenciales
- Alquileres: +402%.
- Luz y gas: +477%.
- Transporte: +350%.
- Medicinas: +254%.
- Combustibles: +257%.
- Alimentos e higiene: +192% y +257%, respectivamente.
El IPC no refleja la realidad cotidiana
- Aunque la inflación oficial (205%) ya supera ampliamente al salario, los rubros críticos para los hogares (servicios, salud, vivienda) registraron aumentos entre 2 y 3 veces mayores.
- Ejemplo: Mientras el salario docente creció 120%, la luz subió 477% y los alquileres 402%.
El informe denunció una estrategia deliberada de devaluación salarial. Los aumentos se deciden "sin negociación paritaria, siempre por debajo de la inflación reportada". Mientras tanto, las empresas proveedoras de servicios esenciales (luz, gas, transporte) imponen alzas "arbitrarias" (300-477%), capturando gran parte del ingreso de los docentes.
De esta manera, el docente promedio destina casi la totalidad de su salario a cubrir servicios y alquileres, sin margen para alimentos o salud.
Preocupación por el desempleo
El empleo no da síntomas de recuperarse, sino todo lo contrario, según surge de un informe de la Secretaría de Trabajo de la Nación divulgado este jueves. La Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de abril mostró que el nivel de empleo privado registrado sufrió un nuevo descenso.
En marzo de 2025, la población con trabajo registrado se redujo en 12.729 personas. De 12.857.207 trabajadores “en blanco” en febrero, bajó a 12.844.478 en marzo.
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La mayor caída en marzo se verificó entre los asalariados registrados (-9.000), mientras los restantes 3.700 eran monotributistas sociales y autónomos. El informe aclara que este fuerte retroceso laboral obedece a la caída del 61% en la cantidad de monotributistas sociales por “los cambios normativos que afectaron a este régimen en particular”, mientras que los aportantes al régimen de autónomos disminuyeron un 4,7% (19,300 personas menos).
Se trata del tercer mes de caída mensual consecutiva y “la misma resultó más elevada que en los meses previos (-0,2%)”. Según el informe oficial, en marzo el empleo asalariado registrado arrojó una variación negativa del 0,1% respecto de febrero (9.000 trabajadores menos).
Este retroceso se explica por el desempeño del sector privado formal y el trabajo en casas particulares. Experimentó un retroceso del 0,1% y 0,2%, respectivamente.
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