El dirigente libertario Nicolás Scioli participó este jueves del primer Congreso partidario de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires, que se desarrolló en la ciudad de La Plata y contó con el cierre del presidente Javier Milei.
Scioli, referente de LLA en Tigre y director del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), integró la mesa de debate sobre economía. En ese marco, destacó la importancia del evento: “Fue un congreso muy relevante, porque se abordaron los temas más urgentes para los bonaerenses, en base a una encuesta que realizamos a nivel provincial con más de 22.000 participantes”.
Durante su intervención, el dirigente tigrense sostuvo que “los municipios de la provincia de Buenos Aires tienen que ser productivos, en pos de contribuir con todo aquel que quiera invertir, desarrollarse y emprender”. Y subrayó: “Hay muchos temas pendientes que le complican la vida a la gente, como el impositivo. Hay que desburocratizar y simplificar, sacarle la pata de la cabeza al que quiera emprender. Hay que bajar tasas e impuestos en la provincia. Es un tema a mejorar para que la Argentina avance”.
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En línea con el mensaje libertario, Scioli remarcó: “Se necesita un cambio realmente profundo, por eso es importante que las ideas de la libertad lleguen a cada rincón del país". Además, expresó su respaldo al presidente Milei: “Una de las cosas que más me motivó de Milei fue la verdad. Porque dijo lo que iba a hacer y después puso el coraje para hacerlo”.
Scioli también cuestionó la desconexión de la dirigencia política con las preocupaciones de la ciudadanía: “Los intereses de los políticos están totalmente desconectados de lo que necesita la gente. No pisan la calle, no salen al territorio a escucharlos”. Y agregó: “A los bonaerenses les importa que se traten temas como la seguridad, la creación de nuevos puestos de trabajo y la baja de impuestos”.
En ese sentido, criticó el funcionamiento del Senado provincial: “Hubo cuatro sesiones este año y en tres los senadores trataron su propia reelección. Están totalmente desconectados con lo que quiere la gente. Yo en la calle no escucho que esto se encuentre entre sus necesidades. Esta es la Argentina que hay que cambiar. La gente no cree en la política porque los dirigentes están desconectados”.