Rusia lamenta profundamente y condena los ataques estadounidenses contra instalaciones nucleares iraníes, dijo el lunes el Kremlin.
Las acciones de Estados Unidos han aumentado el número de participantes en el conflicto y han dado paso a una nueva espiral de escalada, dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Añadió que aún no estaba claro qué había ocurrido con las instalaciones nucleares iraníes y si existía peligro de radiación.
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La situación sobre el terreno en Irán tras los ataques no puede dejar de ser motivo de preocupación, dijo.
Rusia firmó en enero un tratado de asociación estratégica con Irán, aunque no incluía una cláusula de defensa mutua. Antes de los ataques estadounidenses del sábado, Moscú había advertido de que la intervención militar de Estados Unidos podría desestabilizar toda la región y sumirla en el "abismo".
Peskov dijo que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no le había contado en detalle al presidente ruso, Vladimir Putin, sobre los ataques planeados por adelantado, aunque habían discutido la posibilidad de una participación militar de Estados Unidos de manera más general.
Al preguntarle por lo que Rusia estaba dispuesta a hacer ahora, Peskov dijo que Moscú había ofrecido sus servicios como mediador y que lo que ocurriera después dependería de lo que Irán necesitara.
Putin tiene previsto reunirse con el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Abás Araqchi, el lunes.
Con información de Reuters