El papa León condenó el jueves a los líderes políticos que invocan creencias religiosas para justificar conflictos o políticas nacionalistas, calificándolo de una forma de blasfemia, o pecado grave que falta al respeto o insulta a Dios.
León, el primer pontífice estadounidense, no nombró a líderes específicos en el mensaje publicado antes de la Jornada Mundial de la Paz de la Iglesia Católica, que se celebra el 1 de enero, pero pidió a los creyentes religiosos que se resistan a tales usos de la fe.
"Desgraciadamente, cada vez es más frecuente arrastrar el lenguaje de la fe a las batallas políticas, bendecir el nacionalismo y justificar la violencia y la lucha armada en nombre de la religión", afirmó. "Los creyentes deben refutar de forma activa, sobre todo con el testimonio de sus vidas, estas formas de blasfemia que profanan el santo nombre de Dios".
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León también advirtió contra el uso de la inteligencia artificial en la guerra en el mensaje de cuatro páginas emitido anualmente por el líder de la Iglesia de 1.400 millones de miembros.
"Hay (...) una tendencia creciente entre los líderes políticos y militares a eludir la responsabilidad, ya que las decisiones sobre la vida y la muerte se 'delegan' cada vez más en las máquinas", comentó. "Esto marca una traición sin precedentes y destructiva de los principios legales y filosóficos del humanismo que subyacen y salvaguardan toda civilización".
León, elegido por los cardenales del mundo en mayo para suceder al difunto papa Francisco, ha hablado varias veces en su primer año sobre los desafíos que plantea la IA.
También condenó la violencia en nombre de la religión en su primer viaje al extranjero como papa, diciendo a los líderes cristianos de todo Oriente Medio durante una visita a Turquía el mes pasado que deben "rechazar firmemente el uso de la religión para justificar la guerra, la violencia o cualquier forma de fundamentalismo".
En el nuevo mensaje, también lamentó el aumento mundial de los gastos militares, citando cifras del Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz, según las cuales los desembolsos militares en todo el mundo aumentaron un 9,4% en 2024, alcanzando un total de 2,7 billones de dólares, o el 2,5% del PIB mundial.
En este marco, advirtió contra una "lógica de confrontación (que) domina ahora la política mundial, profundizando día a día la inestabilidad y la imprevisibilidad".
(Editado en español por Carlos Serrano)
