Formosa cerró 2025 con una recomposición salarial del 55% y se diferenció de la política de ajuste nacional

El gobernador Gildo Insfrán cerró el año con dos recomposiciones salariales que permitieron sostener el poder adquisitivo de empleados públicos, jubilados y docentes, en marcado contraste con el aumento del 14,81% aplicado por el Gobierno nacional.

31 de diciembre, 2025 | 11.00

En un año atravesado por el ajuste nacional y el desfinanciamiento a las provincias, Formosa acumuló en 2025 un aumento salarial del 55% para el sector público, muy por encima del 14,81% otorgado a los empleados del Estado nacional. La brecha refleja no solo el impacto de las políticas de recorte impulsadas desde Nación, sino también una definición política provincial orientada a sostener el ingreso real de los trabajadores estatales.

La provincia gobernada por Gildo Insfrán logró así duplicar la proyección salarial nacional y superar ampliamente los acuerdos alcanzados en otras jurisdicciones. El último incremento, anunciado en octubre, consistió en una recomposición del 10% aplicada en un único tramo para la Administración Pública Provincial, que alcanzó tanto a agentes activos como pasivos, e incluyó jubilaciones y pensiones de la Caja de Previsión Social.

Este aumento se sumó al anunciado en febrero, cuando el Ejecutivo provincial dispuso una suba del 45% para el primer semestre del año, también extensiva a trabajadores activos y pasivos. A estas medidas se agregan los incrementos otorgados durante 2024, que totalizaron una mejora del 110%, por lo que el esquema salarial acumulado alcanza un 155% en el período 2024–2025.

Según señaló el gobernador en ambos momentos, esta política salarial forma parte del esfuerzo provincial por apuntalar el poder adquisitivo del empleo público, en un contexto de deterioro sostenido de los ingresos provocado por las medidas económicas nacionales, que impactan de manera directa sobre el consumo, la actividad y la recaudación de las provincias

La recomposición salarial vigente en Formosa

La provincia dispuso además un Salario Mínimo de Bolsillo Garantizado de $880.000 para todos los escalafones de la Administración General, cifra que excluye asignaciones familiares y otros complementos. En la misma línea, la jubilación mínima provincial asciendió a $721.600, mientras que la ANSES paga $396.266. En cuanto al salario docente, Formosa fijó un mínimo de $911.800 frente a los $500.000 de Nación.

Estas políticas salariales implicaron un esfuerzo fiscal significativo; más de $21.000 millones de desembolso incremental durante el año, y un total superior a $321.000 millones destinados a haberes, financiados íntegramente con recursos corrientes provinciales, sin endeudamiento. Esto ocurre pese a la caída del 9% real en los fondos coparticipables nacionales registrada en septiembre y una inflación mensual estimada en 2,2%.

Los docentes, entre los mejor remunerados del NEA

Gracias a esta estrategia salarial, Formosa se posiciona como la provincia con el salario docente más alto del Nordeste Argentino. A mediados de octubre, el sueldo neto de un maestro de jornada simple y sin antigüedad alcanzó los $972.176. El incremento responde a la actualización del punto índice, ubicado en $1.463,96, y a mejoras en distintos complementos, incluidos el FOPID, la Conectividad Provincial y los adicionales por servicios.

Insfrán subrayó que estas medidas forman parte de un "propósito permanente de proteger el poder adquisitivo de los trabajadores frente a las perjudiciales medidas socioeconómicas impulsadas por la actual gestión nacional". En ese sentido, remarcó que la política formoseña, sostenida con fondos propios y sin recurrir al crédito, es "diametralmente opuesta" a la línea nacional, que según el gobierno provincial busca "licuar los ingresos" de la población.

Formosa se consolidó durante el 2025, a pesar de las dificultades económicas profundizadas por Nación, como una de las pocas provincias que logra preservar el ingreso real de sus trabajadores en un escenario nacional adverso, lo cual reafirmó al Modelo Formoseño como una de las políticas que mayor imprimen en los trabajadores la justicia social y la independencia económica.