Estados Unidos no participará en el examen de la ONU de su historial de derechos humanos, según anunciaron fuentes oficiales, una decisión que los defensores de los derechos humanos calificaron de preocupante retroceso en el compromiso global de Washington en esta materia.
El Examen Periódico Universal (EPU) prevé que los 193 Estados miembros de la ONU presenten informes sobre su historial de derechos humanos cada 4,5 ó 5 años. Los informes son revisados por otros Estados miembros, que formulan recomendaciones no vinculantes.
Un funcionario del Departamento de Estado estadounidense dijo a Reuters que Estados Unidos no participará en el mecanismo del EPU ni presentará su informe en noviembre, cuando éste y otros 13 países deben ser examinados.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Esto siguió a una orden ejecutiva del presidente Donald Trump el 4 de febrero para desvincularse del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, dijo el funcionario.
"La participación en los EPU implica la aprobación del mandato y las actividades del Consejo (de Derechos Humanos) e ignora su persistente incapacidad para condenar a los violadores más atroces de los derechos humanos", dijo el funcionario.
Portavoces del Consejo de Derechos Humanos intergubernamental de la ONU y de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU dijeron que la Misión de Estados Unidos en Ginebra les había notificado la decisión.
Según un análisis de los registros públicos del Consejo, Estados Unidos va camino de convertirse en el primer país que no presenta un informe al EPU, a menos que lo haga dentro del plazo del actual periodo de examen, que finaliza en julio de 2027.
Ravina Shamdasani, portavoz jefe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), dijo a Reuters que lamentaba la decisión de Estados Unidos.
"El compromiso constructivo con el Consejo, por parte de Estados Unidos y de todos los Estados, ha contribuido a la promoción y protección de los derechos humanos en todo el mundo a lo largo de los años", añadió.
LA DECISIÓN DA A OTROS PAÍSES "UNA EXCUSA"
Aunque no hay consecuencias directas por no presentar un informe al EPU, Michael Posner, director del Centro de Empresas y Derechos Humanos de la Escuela de Negocios Stern de la Universidad de Nueva York, dijo que Estados Unidos estaba socavando los esfuerzos mundiales en materia de derechos humanos.
"Al retirarse del EPU, Estados Unidos da a los grandes violadores de los derechos humanos, como Irán, Rusia y Sudán, una excusa para seguir su ejemplo", afirmó Posner, ex alto funcionario del Departamento de Estado que ayudó a dirigir el proceso del EPU bajo la presidencia de Barack Obama.
Phil Lynch, director ejecutivo de la ONG Servicio Internacional para los Derechos Humanos, con sede en Ginebra, afirmó que con Trump "Estados Unidos se está convirtiendo rápidamente en un Estado paria de los derechos humanos".
La negativa de Washington a participar señaló desdén por las personas que enfrentan discriminación, agregó.
El funcionario del Departamento de Estado dijo en respuesta a las críticas que Estados Unidos está orgulloso de su historial de derechos humanos y de su liderazgo en la promoción de los derechos humanos en todo el mundo.
(Reportaje de Olivia Le Poidevin y Andrew R. C. Marshall; Edición de Frances Kerry, Editado en español por Juana Casas)