Sturzenegger deja el 95% de su plata en el exterior y acá gana con bonos públicos

Según su declaración jurada repite el modelo de los funcionarios de economía: mientras promueven el uso de dólares al resto ellos dejan los suyos en el exterior. Invierte en bonos que se mueven en parte por sus decisiones y no le cierran los números en sociedades creadas en 24 horas. 

08 de agosto, 2025 | 00.05

Federico Sturzenegger, el ministro de Regulación a Favor de Algunas Empresas, tiene el 95% de su dinero líquido afuera del país y el 97% de sus inversiones en bonos públicos. Lo declarado, claro. Las dos cosas dependen de la política económica del Gobierno que integra: sus ahorros en dólares los deja a salvo en el exterior; sus inversiones crecen gracias al plan de Javier Milei y Luis Caputo y a la motosierra, ya que parte del interés del mercado en los bonos argentinos es por el supuesto superávit que ayuda a generar Sturzenegger que, a la par, ve como crecen sus inversiones. De los dos lados del mostrador.

Para ser un hombre que se autopercibe un as de la economía Sturzenegger declara un patrimonio bastante exiguo. Según los papeles que presentó ante la Oficina Anticorrupción tiene un total de 2.371 millones de pesos, incluyendo casas, autos, cuentas en el exterior e inversiones financieras. Son unos 1.800.000 dólares. Suena poco, hasta inverosímil, en línea a los dibujos que presentó Caputo.

Sturzenegger, al igual que Caputo, no confía en el gobierno que integra como para traer sus ahorros. En el país declara 44 millones de pesos en el banco y otros 22 millones en efectivo, casi todo en dólares. En el exterior declara 1.447 millones. O sea que el 95% de su plata líquida la dejó afuera, a salvo de las políticas económicas de Milei. No aclara donde, pero lo concreto es que tiene 22 veces más plata líquida afuera que en la Argentina que en el país.

Lo que no puede mandar al exterior son su casa de 495 metros cuadrados en Martínez, otra casa de 300 metros cuadrados y 3 departamentos que tiene como inversión en CABA y otra casa de 120 metros cuadrados en Villa La Angostura.

El 97% de las inversiones de Sturzenegger están en bonos públicos. Tiene más de 430 millones de pesos en bonos públicos distribuidos así: 351 millones en el GD35, 22 millones en el GD38, 27 millones en GD29 y 30 millones en Discount. Los GD son bonos que se rigen bajo ley extranjera, es decir, que si hay un conflicto para su cobro la cuestión se dirime en tribunales de EEUU. Un patriota.

El valor de esos bonos está influenciado por las decisiones de política económica del gobierno. Entre ellas por la motosierra, ya que un pedido insistente del mercado financiero es que se reduzca el gasto público, tarea de Sturzenegger. Esa tarea de Sturzenegger colabora para que suban los bonos que tiene Sturzenegger. Win win.. Desde que Sturzenegger llegó al gobierno no pararon de subir. El GD35, el que más tiene, pasó de 54 a 89, un 64% en dólares; el GD38 pasó de 60 a 96, un 60% en dólares; el GD29 de 73 a 87, un 19% en dólares; Discount de 31 a 37, un 19% en dólares.

En agosto de 2024, cuando entró formalmente al gobierno de Milei -estaba de hecho desde mucho antes- Sturzenegger ya declaraba bonos pero por valores mucho menores. Tenía 195 millones en GD35, 16 millones en GD 29, otro 1 millón en GD29 y 16 millones en GD38. Los números actuales muestran que se los quedó y le fue muy bien. 

¿Los funcionarios pueden tener bonos públicos entre sus inversiones? Sí. La ley es muy laxa en ese sentido. Incluso podrían alegar que invierten en esos bonos que suben "si le va bien al país" y eso es una señal de confianza. Pero esa es una frase hecha: al país le puede ir bien en la macro y que los bonos suban, como quiere Milei, mientras en la vida real aumenta el desempleo, los salarios reales hace 4 meses que caen, el salario mínimo real es el peor en 30 años, los jubilados no llegan al fin de semana, cientos de miles de niños se pueden quedar sin posibilidad de curarse, la vida está en riesgo porque no arreglan las rutas e incluso falsean los datos del superávit financiero al esconder los intereses capitalizables de la bola de deuda que generan de forma sistemática. Por ende, los bonos subieron por políticas económicas que perjudican a la mayoría. Benefician a los que tienen esos bonos, entre ellos Sturzenegger, que define parte de esas políticas. 

Sturzenegger también declara una empresa que se llama Un Ombu SAS. Las SAS son las firmas creadas en 24 horas sin ningún tipo de control, un legado del gobierno de Mauricio Macri que, si bien puede ser útil, sirvió en muchos casos para el ocultamiento de bienes y negocios.

El actual ministro creó Un Ombú SAS en octubre de 2018, poco después de su salida del gobierno de Macri. La comparte con su esposa, María Josefina Rouillet. En el objeto de la empresa hicieron el truco de que sea para cualquier cosa e incluyeron actividades agropecuarias, de comunicación y espectáculos, culturales y educativas, desarrollo de tecnología, gastronómicas, hoteleras y turísticas, inmobiliarias y constructoras, inversoras y financieras, petroleras, gasíferas, forestales, mineras, energéticas, salud y transporte.

Sturzenegger y su esposa crearon la sociedad con $21.400. Hoy Sturzenegger declara el 100% de la firma por un valor de $10.700. Parece que puso mal el porcentaje, ya que va a medias con su esposa y ahí la cuenta daría. Por otro lado, si la empresa aún vale $21.400 significa que en 7 años no le hicieron ni un aporte de capital.

La dirección de Un Ombú SAS es Libertad 1041 4to A. Lo curioso es que ahí funciona Odontopraxis Americana que, según su web, es “una empresa dedicada al gerenciamiento de servicios odontológicos”. Y no es de Sturzenegger. 

Según consta en el Boletín Oficial en mayo de 2019 Sturzenegger creó otra SAS que se llama “Mi Casa Propia”. Sus socios son Gonzalo Delger, Silvio Ruggieri y Andrés Freire. La última información registrada de esa sociedad es del 7 de junio de 2021, cuando los socios, incluido Sturzenegger, la adecuaron a unos requerimientos legales. No hay registro de que Sturzenegger dejara la empresa pero no la incluyó en su Declaración Jurada. Tal vez porque en noviembre de 2024 llegó a estar en rojo con una deuda de 196.000 pesos con el Banco Supervielle de categoría 4, que significa riesgo alto con un atraso en el pago de más de 180 días.