Los mayores de 50 años tienen que empezar a consumir más yogur, según expertos

Expertos aseguran que este alimento rico en probióticos y calcio es fundamental para la vida de los mayores de 50 años.

12 de noviembre, 2025 | 18.54

El yogur natural, sin azúcar, es un alimento que parece simple a primera vista, pero no lo es. Aunque puede formar parte de la dieta de cualquier persona, los especialistas aseguran que a partir de los 50 años su consumo se vuelve especialmente importante. En esta etapa, el cuerpo necesita más proteínas, calcio y nutrientes que ayuden a mantener los huesos fuertes, los músculos activos y una buena digestión.

Su historia se remonta a más de 4000 años. Se originó en Medio Oriente, cuando los pueblos nómadas transportaban leche en sacos de piel de cabra y, por el calor, esta se fermentaba de forma natural. Con el tiempo, ese hallazgo accidental se transformó en una costumbre alimentaria que hoy sigue vigente.

El yogur natural es sumamente saludable para los mayores de 50 años.

Ya en el siglo XIX, el científico búlgaro Stamen Grigorov identificó las bacterias que fermentan la leche, y poco después, el ruso Ilya Metchnikoff relacionó el consumo de yogur con la longevidad, dando origen al concepto de los probióticos.

“El yogur es alto en proteínas, calcio, vitaminas del grupo B y grasas saludables, además de minerales como fósforo, potasio y magnesio”, explica la nutricionista Milagros Sympson (M.N. 12067). Por eso, asegura que es un alimento ideal para quienes quieren llevar adelante una dieta equilibrada, sobre todo en adultos mayores.

Beneficios del yogur en los mayores de 50 años

El yogur aporta proteínas de alta calidad, que ayudan a mantener la masa muscular y la energía. “Cien gramos de yogur natural de leche entera aportan unos 4 gramos de proteína”, detalla Sympson. También genera saciedad, lo que puede ser útil para controlar el peso.

En este sentido: “El yogur es una de las mejores fuentes de calcio que el cuerpo puede absorber”, afirma la especialista. Una porción de 200 gramos puede cubrir hasta un 30% del calcio diario recomendado. Si además contiene vitamina D, su efecto sobre los huesos es aún mejor, lo que resulta ideal para los adultos mayores.

Por otro lado, los probióticos del yogur natural ayudan a mantener el equilibrio de la flora intestinal, previniendo molestias como el estreñimiento o la hinchazón. Además, fortalecen el sistema inmune y reducen la inflamación. Asimismo, las vitaminas del grupo B presentes en el yogur favorecen el metabolismo, la salud de la piel y la formación de glóbulos rojos.