Velas de cumpleaños: su misterioso origen, historia y desde cuándo se soplan

Te contamos la historia de las velas de cumpleaños, su misterioso origen y desde cuándo se soplan.

18 de diciembre, 2025 | 19.12

Hay tradiciones que están tan naturalizadas que ni nos preguntamos por su historia, ni mucho menos su origen. Un ejemplo muy claro son las velas de cumpleaños. Todo habría comenzado en la Antigua Grecia con las ofrendas de luz, las cuales se encendían para honrar a los dioses, a través de lámparas de aceite, antorchas y, desde luego, velas. Pero el origen de las velitas de cumpleaños también estaría arraigado en la Alemania medieval, cuando estas se usaban para invocar bendiciones, alejar la desgracia y representar el delicado equilibrio entre la vida y la muerte.

En concreto, no hay registros que certifiquen el uso de velas de cumpleaños en la Antigua Grecia, sin embargo, Marie Nicola, historiadora de la cultura pop, afirman que la idea probablemente proviene de rituales asociados con Artemisa, la diosa griega de la luna. Sin ir más lejos, en el templo de Artemisa de Éfeso, uno de los principales templos de Artemisa, se descubrieron pasteles redondos, conocidos como noûton-gonosupahon, que se usaban como ofrendas votivas.

Las velas de cumpleaños cuentas con un misterioso origen.

En lo que respecta al origen alemán, las velas de cumpleaños en tortas, suelen atribuirse al Kinderfest, una fiesta tradicional que celebra a los niños. En este sentido, Margit Grieb, profesora asociada de Estudios Alemanes en la Universidad del Sur de Florida, explica: "En aquella época se creía que los niños eran especialmente vulnerables a los malos espíritus en sus cumpleaños", entonces, encender velas habría sido la manera de protegerlos.

Siguiendo esta línea, una de las primeras referencias a las velas de cumpleaños en tortas es de Johann Wolfgang von Goethe, quien narra su 52° cumpleaños en Gotha en su autobiografía Tage-Und Jahreshefte. Allí describe una gran torta con cincuenta velas. Otro registro que data del uso de velitas es suizo. Investigadores de The Folk-lore Journal recuperaron la documentación de un cumpleaños de clase media de 1881, donde se ve a un cumpleañero soplar las velas, una por cada uno de sus años. A diferencia de los alemanes, los suizos no dejaban que las velas se consumieran, sino que las apagaban antes.

Cómo llegó la tradición al resto del mundo

La tradición de soplar la velas de cumpleaños se desparramó por el mundo a través de las oleadas inmigratorias a Estados Unidos. Y es que, tras la Segunda Guerra Mundial, el país norteamericano exportó a través del consumo esta tradición que había heredado años atrás con la llegada de los barcos. Hoy, no se puede pensar un cumpleaños sin al homenajeado soplando las velitas.