“Un amigo incondicional y un papá increíble”, así definieron los allegados a Cristian Granado, el ciclista que murió atropellado por un chofer de aplicación en José C. Paz. Tenía 34 años, era emprendedor y hacía tres años había sido padre por primera vez.
El pasado lunes, Granado -después de trabajar por la mañana- se dirigía en bicicleta a la casa de su madre para almorzar. En ese trayecto, fue atropellado por el chofer de un auto de aplicación que circulaba en contramano. El vehículo estaba llevando a bordo a una pasajera, que fue testigo del siniestro y de cómo obró desconsideradamente el conductor.
Por el impacto, el ciclista quedó tendido en el asfalto y muy herido. Fue entonces que el chofer, identificado como J.L.G., se bajó del Ford Fiesta color plateado, lo arrastró a un lado del camino y abriéndose paso aceleró dejando a Cristian tirado. Esos minutos eran muy valiosos, porque serían los últimos de la vida del ciclista. Por las lesiones en la espalda, murió antes de recibir cualquier tipo de ayuda.
Los últimos días de la vida de Cristian
El fin de semana el ciclista había pasado una tarde con sus hermanos. En las redes sociales publicaron una foto de aquel momento, donde se lo puede ver a Cristian junto a la misma bicicleta que usaba al momento del accidente.
“No lo puedo creer hermano, te vi ayer con tu familia”, “Qué tristeza, no lo puedo creer”, “Ojalá fuera un mal sueño”, “El mejor de todos siempre, un amigo incondicional y un papá increíble”, escribieron los amigos y familiares del ciclista en las redes sociales.
Y es que Cristian era una persona muy querida en su comunidad. Trabajaba en una mueblería llamada “Muebles populares”, estaba en pareja hace 14 años y tenía un hijo de 3.
El trágico accidente donde Cristian perdió la vida quedó grabado por cámaras de seguridad. Sin embargo, desde su círculo íntimo piden que todas las personas que puedan aportar datos se acerquen a la policía o a ellos mismos a través de las redes.
La fuga del conductor de aplicación
Después de huir dejando a Cristian morir en el asfalto, en la avenida Remigio López al 4.700, interceptaron al chofer del Ford Fiesta e incautaron el vehículo con el que kilómetros atrás había atropellado a la víctima.
J.L.G. no dejó descender de su auto a la pasajera y solo dejó que abriera las puertas del auto cuatro cuadras más adelante. Según los testigos, el chofer “se entregó cuando supo que lo andaban siguiendo”.
Cómo sigue la causa
La investigación por la causa de homicidio culposo agravado quedó a cargo de la fiscal Gloria Reguan, de la UFI N° 4 del Departamento Judicial San Martín. J.L.G. permanece detenido, esperando indagatoria.