Después de tres días de intensa búsqueda en la provincia de Córdoba, este miércoles al mediodía las autoridades encontraron sin vida a Rosa Carlina Ochoa, una mujer de 66 años que había desaparecido el domingo pasado en Villa María. Su cadáver fue hallado en el lecho del río Ctalamochita, en cercanías de la playa Santa Ana, punto clave donde se había concentrado el operativo de rastrillaje.
El hallazgo se produjo minutos antes de que comenzara una nueva etapa del procedimiento de búsqueda que iba a intensificarse desde las 13. Familiares de la víctima ya fueron notificados por la Justicia y la Policía.
Por orden del fiscal de Instrucción de Feria, René Bosio, la Policía Científica trasladó el cuerpo a morgue judicial de Villa María, donde se le practicó la autopsia. El médico forense, Dr. Rodríguez, emitió un informe preliminar que señala que la mujer no presentaba signos de violencia externa. El documento, comunicado por la Policía, arrojó que la causa eficiente del fallecimiento fue asfixia por sumersión.
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Durante las jornadas previas, se había desplegado un importante operativo con recursos terrestres, náuticos y aéreos, que incluyó la participación de personal especializado de distintas fuerzas. El lugar donde se encontró el cuerpo fue rastreado a partir de datos de geolocalización del celular de Rosa, que indicaban su presencia en la zona de la playa Santa Ana el mismo día de su desaparición.
En junio de 2022, Rosa y su esposo fueron atropellados cuando cruzaban avenida Alem, a la altura del Centro de Transferencias. Su marido, Alberto Rodas, de más de 70 años, estuvo hospitalizado por traumatismo de cráneo y falleció un mes después, el 6 de julio de ese año. Hace algunos días, se cumplió un nuevo aniversario del fallecimiento del hombre.
Macabro hallazgo en Córdoba: revelaron los resultados de la autopsia del cuerpo encontrado en un placard
Hace 10 días, un espeluznante descubrimiento conmocionó a la ciudad de Córdoba, luego de que se diera a conocer que dos albañiles encontraron un cadáver oculto en el ropero de un departamento en el que se encontraban haciendo refacciones. Este martes, la autopsia determinó que el cuerpo pertenece a una mujer de unos 30 años, y se cree que su muerte se habría producido hace unos seis meses aproximadamente. Su identidad aún no pudo ser confirmada.
El cadáver fue encontrado el 5 de julio en un edificio ubicado en la calle Buenos Aires al 315, en pleno centro de la capital cordobesa. Estaba sentado en el interior de un ropero, envuelto en mantas, atado con cables y tapado con cemento. El olor nauseabundo que emanaba el estado de descomposición de los restos fue lo que alertó a los trabajadores.
El caso se encuentra bajo la órbita de la fiscalía de instrucción de Distrito 1 Turno 5, a cargo de María Celeste Blasco, actualmente subrogada por Florencia Espósito. Las miradas de la investigación se posan sobre Horacio Antonio Grasso, un ex policía condenado por el homicidio de un menor de edad en 2007. Grasso se encontraba cumpliendo prisión domiciliaria en el mismo departamento donde fue hallado el cuerpo, pero días antes fue trasladado nuevamente a la cárcel de Bouwer por incumplimientos reiterados en las condiciones del arresto.
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