Cristian Frink, de 37 años de edad, y su hijo Álvaro de 3 años, fueron hallados sin vida este jueves en las profundidades del Dique El Cajón, cerca de la localidad de Capilla del Monte, en la provincia de Córdoba.
Si bien no está confirmado el motivo de los fallecimientos, el fiscal Nelson Lingúa, de la Fiscalía de Instrucción de Cosquín, maneja una hipótesis clara.
Restan por conocer los resultados de las autopsias y los investigadores aún no descartan ninguna teoría, sin embargo, el fiscal que lleva la causa considera que ambos murieron ahogados, en medio de un intento de rescate desesperado por parte del papá.
Los resultados de las autopsias serán fundamentales para determinar si la hipótesis es correcta, pero según la información que tienen hasta el momento “todo indica que el chico se cayó en un lugar donde hay pozos y el padre quedó enredado cuando se metió para sacarlo del agua”.
En la misma línea, el comisario José Santos Vega, director de la Departamental Punilla Norte, dijo ayer a Radio Cadena 3: “Una de las hipótesis más fuertes que se maneja sería que fue accidental”. A su vez, el jefe policial sugirió que el niño podría haberse caído al agua y que el padre intentó rescatarlo.
La desaparición y posterior fallecimiento
Al parecer, padre e hijo habrían sido vistos por última vez el 10 de septiembre, cuando ambos se dirigieron a la zona del río para "tirar piedras", actividad que solían compartir de forma recreativa.
Sin embargo, al pasar las horas sin regresar a su casa, su familia comenzó a inquietarse, situación que se profundizó cuando, al intentar contactar el teléfono de Cristian, no recibieron respuesta alguna.
Ante la desesperación, la familia optó por realizar una búsqueda en el río Calabalumba. Allí encontraron una de las primeras pistas: el auto de Cristian. Al encontrarse con el Chevrolet Aveo del hombre, pudieron percatarse de que el mismo estaba estacionado a unos 600 metros del balneario Águila Blanca. El auto no poseía señales de violencia ni de forzado en el vehículo.
Bajo ese marco, los familiares de Cristian y Álvaro tomaron la decisión de dar aviso a las autoridades de inmediato, activando un operativo de búsqueda que se llevo a cabo desde la noche del miércoles y continuó hasta el hallazgo de los cuerpos este jueves por la tarde.
Los operativos de las fuerzas policiales y equipos especializados incluyeron recorridos en los márgenes del lago y otros sectores del rio, sumando también inspecciones en edificaciones cercanas. Además, se requirió también la participación de la Secretaria de Riesgo Climático, para que las brigadas recibieran coordinación para avanzar por áreas de acceso dificultoso debido al relieve serrano.
Según el Ministerio de Seguridad de Córdoba, más de cien efectivos participaron de la búsqueda del hombre y su hijo.