La crisis socioeconómica impulsada por el modelo de ajuste de Javier Milei impacta de lleno en el sistema de salud pública y en el poder adquisitivo de los trabajadores. En medio del conflicto en el Hospital Garrahan, el panorama en los centros de salud del resto de las provincias también resulta crítico.
En ese marco, la presidenta de Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA), María Fernanda Boriotti, denunció en diálogo con El Destape que los profesionales provinciales perciben "sueldos por debajo de la línea de la pobreza".
El recorte de haberes establecido por el gobernador Maximiliano Pullaro durante su primer año de gestión y en el comienzo de este 2025, solo marca la réplica del mandatario radical al modelo económico del presidente Milei: personal de Salud recibió una oferta salarial del 8%, escalonada en cuotas del 3% en abril, 2,6% en mayo y 2,4% en junio. Luego de esa irrisoria propuesta, la Asociación de Médicos de la República Argentina (AMRA) resolvió aceptar en disconformidad el incremento. Por su parte, el Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus) lo rechazó y realizó una jornada de protesta con paros y movilizaciones el pasado 14 de mayo.
"Está claro que los resultados no dependen tanto de la oferta en sí, salvo algunos sectores particulares; sino más bien de la actitud autocrática del Ejecutivo Provincial, que continuamente cercena los derechos a huelga de los trabajadores con actitudes persecutorias condicionando las paritarias sectoriales a lo resuelto en la central", señalaron desde AMRA.
En un contexto marcado por los recortes presupuestarios y la precarización laboral, Boriotti, que también es secretaria General de Siprus, reflejó la situación crítica que atraviesan los trabajadores del sector y cargó contra Pullaro y Milei al asegurar que sus administraciones llevan adelante "negociaciones verticales con pautas subinflacionarias". En declaraciones para este medio, detalló que, en tan solo un año y medio, los profesionales de la salud perdieron "un 25%" de su poder adquisitivo.
Además, sostuvo que existe "un abatimiento del estímulo para trabajar en salud que es muy preocupante". Y detalló que esta situación se ve reflejada en "pedidos de licencias, renuncias y la migración de profesionales hacia otras provincias, incluso para realizar guardias aisladas". También hizo referencia a la escapada del país de los trabajadores hacia otros países "que ofrecen mejores condiciones laborales". Esto se da en países limítrofes, como Chile, en América del Norte, como Canadá, o también en Europa, donde se registra una búsqueda activa de profesionales.
Los sueldos de miseria que cobran los profesionales de salud en Santa Fe
El salario de los residentes del Garrahan es de $797.000 mil pesos mensuales, que podría elevarse a $830.000 en segundo año por el aumento “por mérito”, pero que incluso en cuarto año, el último de la residencia, tampoco llegan al millón. En esa línea, la situación de los médicos santafesinos no escapa a la realidad de la Argentina de Milei, cuyo modelo es apoyado por Pullaro.
En declaraciones para este medio, Boriotti detalló que "un trabajador de la salud en la provincia de Santa Fe, sin antigüedad, cobra 950 mil pesos", mientras que "un monotributista, que está esperando su pase a planta, está en 850". No obstante, la cantidad de años ejerciendo tampoco es garantía de un sueldo acorde a sus tareas, ya que la titular de FESPROSA detalló que "profesionales universitarios formados, con 20 años" de antigüedad, como "un médico, bioquímico o nutricionista", ganan "alrededor de $1.150.000 o $1.200.000".
"Esta es una constante en todo el país", afirmó la representante de los profesionales de salud, quien remarcó que "la diferencia está en las distintas carreras profesionales que hay en cada provincia y las categorías". En ese marco, dio el ejemplo de un profesional full-time, es decir, un trabajador que presenta bloqueo de matrícula y no puede ejercer en otro lugar: "En la provincia de San Luis, los trabajadores que tienen una carga semanal de alrededor de 48 horas, van de 1.300.000 a 2 millones". A su vez, aseguró que la precariedad reside en que "no son planta permanente", sino que les realizan "contratos renovables cada 3 meses".
Mientras los residentes del Garrahan afirmaron que no recibieron "ninguna oferta ni ninguna propuesta oficial" sobre un aumento salarial, la situación de los trabajadores de la Salud en Santa Fe y el resto del país también es desesperante, lo que evidencia el sufrimiento de los trabajadores de la salud, enfrentando no solo las condiciones laborales precarias y salarios insuficientes, sino también la falta de respuestas y el destrato por parte de las autoridades provinciales y nacionales.