Escándalo en la Policía de Córdoba: detuvieron a un cabo acusado de sacar fotos a sus compañeras en el baño

El agente Germán Peralta fue aprehendido e imputado por los delitos de lesiones graves agravadas por violencia de género y violación de domicilio. Hay al menos tres denuncias formales y no se descarta que puedan sumarse más víctimas.

04 de noviembre, 2025 | 16.28

El escándalo que sacudió a la Jefatura de Policía de Córdoba sumó un nuevo episodio: este martes, fue detenido el cabo Germán Peralta, acusado de filmar y sacar fotos a sus compañeras mientras se encontraban en el baño de la división de Medicina Laboral. El sospechoso fue imputado por los delitos de lesiones graves agravadas por violencia de género y violación de domicilio.

El caso se investiga bajo la órbita del fiscal de Ciberdelitos, Franco Pilnik, quien dispuso el arresto del efectivo. Peralta está imputado por los delitos de lesiones graves agravadas por violencia de género y violación de domicilio, según confirmaron fuentes judiciales a El Doce

El hecho se conoció a fines de julio, cuando una oficial que utilizaba el baño del área de Medicina Laboral advirtió una mano con un celular asomando por un hueco en la pared, apuntando directamente hacia ella. De inmediato, dio aviso a sus superiores y se inició una investigación puertas adentro. Con el avance del sumario administrativo, los responsables lograron identificar al suboficial señalado por sus compañeras y apartar al acusado de sus funciones. 

Una de las denunciantes relató la angustia del grupo afectado: “Aparentemente, se trataría del secuestro de un celular donde hay imágenes y fotos del personal femenino mientras iba al baño en distintas situaciones de higiene personal. Se ha violado nuestra intimidad y lo más triste es que no podemos saber si estamos o no en esas grabaciones”, afirmó la mujer en diálogo con Arriba Córdoba

Hasta el momento, hay al menos tres denuncias formales y no se descarta que puedan sumarse más víctimas. La Fiscalía analiza el contenido del teléfono secuestrado para determinar el alcance del material y la posible difusión de las imágenes.

Femicidio de Brenda Torres: qué reveló la autopsia de la joven descuartizada en Córdoba

La autopsia a Brenda Torres, la joven de 21 años asesinada y descuartizada en Córdoba, reveló que murió de diversas puñaladas al corazón. Según indicaron, la mujer presentaba varias heridas de arma blanca en el tórax que llevaron a la conclusión de que fueron las que acabaron con su vida. El examen médico demoró más de un mes en completarse debido a la complejidad de la reconstrucción y al estado de los restos hallados.

De todos modos, no se descartan otras hipótesis, ya que aún faltan partes del cuerpo de la joven por encontrar; entre ellos el cuello, que podría ser una pieza clave para confirmar si hubo asfixia, señalaron fuentes con acceso a la investigación. El caso de tiene dos detenidos acusados de femicidioGustavo Martín Lencina (53), alias “Carpi”, y Christian Alexis Aranda (38).

El caso salió a la luz en julio de este año, cuando un sereno encontró restos humanos dentro de una bolsa de consorcio en un descampado del barrio Chateau Carreras, mientras que sus extremidades aparecieron en otras bolsas desparramadas por distintos puntos de la zona. La pesquisa llevó a los investigadores a allanar una casa de la misma zona, donde vivían los aprehendidos. En el patio de la vivienda, se encontraron más restos de la víctima enterrados.

Incluso fue su propio padre quien descubrió las vísceras mientras juntaba palos en un descampado. Los peritos debieron cotejar fragmento por fragmento para determinar que todos correspondían a la misma persona. El informe final descartó que la joven haya muerto por sobredosis o consumo de drogas. En cambio, los forenses concluyeron que las lesiones punzocortantes en el tórax eran “eficientes para causar la muerte”.

La joven, oriunda de la localidad de La Calera, fue encontrada con su torso y cabeza enterrados. La fiscalía detalló que las heridas punzantes que presentaba la víctima (entre tres y seis puñaladas en el tórax) fueron realizadas cuando estaba con vida. Además, obran otras pruebas como la sangre hallada en una habitación y un baño de la casa, marcas que son compatibles con una muerte violenta.