El invierno está a la vuelta de la esquina, pero la baja temperatura ya empezó a golpear a Argentina trayendo como consecuencia la proliferación de virus y bacterias. Precisamente, es en esta época cuando los resfríos y la baja energía acechan. Y aunque si bien hay una gran variedad de suplementos y remedios que pueden ingerirse, también existe una infusión casera preparada con mandarina que puede convertirse en tu aliada diaria. Además de evitar desperdicios, esta bebida concentra aceites esenciales, vitamina C y antioxidantes que ayudan a reforzar el sistema inmune, mejorar la digestión y brindar un efecto relajante gracias a su aroma cítrico.
Precisamente, para preparar esta infusión se necesita la cáscara de la mandarina, es decir que puede consumirse la fruta y luego guardar la cáscara para prepararla. En la medicina tradicional china, las cáscaras secas se conocen como chen pi y se usan en tés para apoyar la salud digestiva. Aquí, la costumbre popular recurre a este remedio para aliviar molestias gastrointestinales, disminuir la hinchazón y fortalecer el sistema inmunológico, especialmente en los días fríos. Además, los flavonoides presentes, como hesperidina y tangeretina, aportan beneficios cardiovasculares al reducir el colesterol y proteger la circulación.
La infusión puede prepararse con cáscaras frescas o bien con algunas secas que se almacenen en lugares aislados de humedad. Para realizar este último paso, las cáscaras de mandarina se pueden secar al sol u horno en baja temperatura y conservar para usar durante toda la temporada, incluso para quienes no les guste el té, se la pueden sumar al mate para aprovechar los beneficios. Además funcionan como ambientador natural o repelente de insectos, aportando un aroma fresco sin químicos al ambiente.
Cómo preparar la infusión de cáscaras de mandarina: el paso a paso
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Lavá bien las cáscaras (preferentemente de frutas orgánicas).
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Hervílas en una taza de agua durante 5 a 10 minutos.
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Colá y serví caliente; si no la consumís de inmediato, sacá las cáscaras para evitar el amargor.
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Podés sumar jengibre, canela, clavo o una cucharadita de miel para potenciar sabor y propiedades.
Qué pasa si como dos mandarinas todos los días: los increíbles beneficios
Las mandarinas son una de las frutas más consumidas en América Latina debido a su delicioso sabor, su aroma, frescura y su versatilidad. Sin embargo, lo que muchas personas no sabían es que tiene amplios beneficios para la salud.
Según Medicine Plus, Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, "una dieta saludable incluye consumir frutas a diario, y algunas son bajas en calorías y ricos en minerales, fibra y vitaminas". Además, la mandarina es rica en vitamina C, vitamina A, flavonoides, betacaroteno, vitamina B1, vitamina B2, vitamina B6 y aceites esenciales.
De acuerdo con los expertos en nutrición, si se comen dos mandarinas por día, se puede conseguir tener suficiente vitamina C y el 10% del betacaroteno o provitamina A. Además, el ácido fólico y los folatos son fundamentales para la producción de glóbulos rojos y la formación de anticuerpos. La mandarina también tiene un alto contenido de fibra, potasio, calcio, magnesio, hierro, zinc y fósforo.