Este miércoles, se conoció la lamentable noticia del fallecimiento de una de las actrices de The Walking Dead, la serie de zombies que fue y sigue siendo furor en Netflix, a los 33 años tras una larga lucha contra el cáncer. La noticia se dio a conocer a través de sus redes sociales y los fanáticos quedaron costernados.
Se trata de Kelley Mack, conocida por su papel en la exitosa serie de ciencia ficción, quien batallaba contra un cáncer del sistema nervioso central. Su triste desenlace fue confirmado por su familia, que informó que murió de forma pacífica en su casa de Cincinnati, Ohio, acompañada por su madre Kristen y su tía Karen.
“Una luz tan brillante y ferviente que ha transitado hacia el más allá”, escribió su hermana en redes sociales al despedirla públicamente. Fue la propia Kelley quien, en enero de este año, había comunicado su diagnóstico: un glioma, un tipo de tumor que afecta al cerebro o la médula espinal, tras experimentar dolores en la zona lumbar y las piernas.
Cómo fue la carrera artística de Kelley Mack
Graduada en cinematografía por la Universidad Chapman, Mack comenzó su carrera en el cine independiente. Su debut llegó con el cortometraje The Elephant Garden, y luego participó en series como Chicago Med y 9-1-1, antes de alcanzar mayor reconocimiento en la novena temporada de The Walking Dead (2018-2019), donde interpretó a Addy, una joven que luchaba por sobrevivir al apocalipsis zombie.
Su personaje fue asesinado por “Los Susurradores”, uno de los grupos más temidos de la serie. Su presencia en la pantalla, aunque breve, dejó una huella imborrable entre los fanáticos del universo creado por Robert Kirkman.
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