El helado de flan y dulce de leche es una propuesta irresistible que combina dos clásicos argentinos en una versión cremosa, fácil de preparar y perfecta para compartir. Esta receta, que se volvió viral por su sencillez y resultados sorprendentes, es ideal para quienes quieren hacer un postre casero sin necesidad de máquina de helado: solo con una batidora.
Además de su sabor “riquísimo”, esta preparación se destaca por su versatilidad. Podés usar flan de vainilla o chocolate, sumar trozos de galleta para darle textura, o intensificar el gusto agregando esencia de vainilla o un toque de caramelo. Y si preferís una versión más liviana, podés reducir la crema o usar leche descremada (aunque la cremosidad final será menor).
Ingredientes:
- 1 sobre de polvo de flan para 8 porciones
- 500 cc de leche
- 350 g de crema de leche
- 3 cucharadas de azúcar
- 3 cucharadas de dulce de leche repostero
- 350 g de chocolate cobertura (opcional, para bañar)
Preparación paso a paso del helado casero de flan y dulce de leche
- Preparar el flan: Seguí las instrucciones del sobre, pero usá solo 500 cc de leche para lograr una base más firme. Cociná hasta que espese, dejá enfriar completamente a temperatura ambiente.
- Batir la crema: En un bol, batí la crema de leche con el azúcar hasta lograr una textura semimontada: aireada pero cremosa, sin pasarte para que no se corte.
- Incorporar el flan: Agregalo a la crema y mezclá con movimientos envolventes hasta obtener una preparación homogénea.
- Sumar el dulce de leche: Añadí las cucharadas de dulce de leche repostero y mezclá suavemente para integrarlo bien.
- Llevar al freezer: Podés verter la mezcla en moldes individuales con palitos o en una fuente grande. Congelá al menos 4 horas, hasta que esté firme.
Otra opción extra, es hacerle un baño de chocolate derritiendo la cobertura y bañando las porciones o bochas de helado. Al enfriarse, se forma una capa crujiente que le da un toque gourmet irresistible.