Postre cítrico: la receta de las galletitas de maicena con lemon curd

Clásicas y frescas, las galletitas de maicena con lemon curd combinan suavidad y acidez en un postre fácil, elegante y perfecto para cualquier ocasión.

02 de noviembre, 2025 | 14.35

Hay combinaciones que nunca fallan, y la de galletitas de maicena con lemon curd es una de las más irresistibles. La suavidad y el sabor delicado de la masa se equilibran a la perfección con la acidez del limón, dando como resultado un postre fresco, liviano y elegante, ideal para acompañar el té, agasajar a alguien especial o simplemente disfrutar en casa.

Estas galletitas son una  renovada de un clásico, con un toque cítrico que las vuelve modernas y sofisticadas. Y lo mejor: no requieren experiencia previa en pastelería.

La galletitas de maicena con lemon curd son una opción sencilla y económica para hacer en casa.

Los ingredientes

Para la masa:

  • 150 g de manteca (a temperatura ambiente)

  • 100 g de azúcar impalpable

  • 2 yemas

  • 1 cucharadita de esencia de vainilla

  • 200 g de maicena

  • 100 g de harina 0000

  • 1 cucharadita de polvo de hornear

  • 1 pizca de sal

Para el lemon curd:

  • 2 yemas

  • 1 huevo entero

  • 100 g de azúcar

  • Jugo de 2 limones (unos 80 ml)

  • Ralladura de 1 limón

  • 50 g de manteca

El paso a paso de las galletitas de maicena con lemon curd

  1. Batir la manteca con el azúcar impalpable hasta obtener una crema aireada.

  2. Incorporar las yemas y la esencia de vainilla.

  3. Agregar los ingredientes secos tamizados y unir sin amasar.

  4. Envolver la masa en film y llevar a la heladera por 30 minutos.

  5. Estirar a medio centímetro de espesor, cortar círculos y hornear a 170 °C por 10 a 12 minutos, hasta que estén apenas doradas.

Para el lemon curd, mezclar las yemas, el huevo, el azúcar, el jugo y la ralladura de limón en una ollita. Cocinar a fuego bajo sin dejar de revolver hasta que espese (sin hervir). Retirar del fuego, incorporar la manteca en cubos y mezclar hasta lograr una crema lisa. Una vez fría, la textura se vuelve más firme y brillante.

Para el armado, colocar una cucharadita de lemon curd sobre una galletita y cubrir con otra, presionando suavemente. Se pueden decorar con azúcar impalpable o con un hilo de glaseado de limón.

Con pocos ingredientes y un proceso sencillo, estas galletitas logran un resultado digno de pastelería. La clave está en el contraste entre la textura mantecosa de la maicena y la acidez justa del relleno. Además, el lemon curd puede aprovecharse para tartas, macarons o pavlovas.