El ritual casero para limpiar las energías durante Mercurio Retrógrado

Un ritual simple y casero para aprovechar Mercurio retrógrado como una pausa para soltar lo que pesa, limpiar la energía y abrir espacio a nuevos comienzos.

22 de noviembre, 2025 | 20.02

Cada vez que llega Mercurio retrógrado, el clima colectivo parece teñirse de la misma sensación: mensajes que no se entienden, mails que no se envían, decisiones que se traban, reuniones que se caen y tecnología que, de repente, deja de funcionar. La fama de este fenómeno astrológico está asociada a los enredos, los malentendidos y los retrasos. Pero, desde la mirada espiritual, este período no solo plantea desafíos, también abre una puerta poderosa hacia la introspección y la limpieza energética.

Lejos de ser un enemigo cósmico, Mercurio retrógrado funciona como un llamado a bajar la velocidad. Invita a revisar lo pendiente, observar con más claridad lo que no está funcionando y cerrar ciclos que venimos postergando. Por eso, muchas personas eligen aprovechar esta etapa para realizar rituales de liberación y orden interno. 

Un momento para frenar y escuchar

En tiempos donde todo sucede rápido, este tránsito astrológico propone silencio, intuición, pausa. Es justamente en ese terreno más calmo donde la energía puede reorganizarse. Hacer un ritual durante Mercurio retrógrado no apunta a “evitar problemas”, sino a mirar hacia adentro y limpiar lo que está estancado para habilitar nuevos caminos.

Qué vas a necesitar

  • Una vela blanca
  • Un papel y una lapicera
  • Un vaso con agua
  • Un sahumerio, incienso o palo santo (opcional)
  • Un espacio tranquilo y sin interrupciones

Lo ideal es hacerlo al atardecer o por la noche, cuando la energía del día empieza a bajar. Un ambiente silencioso o con música suave ayuda a entrar en clima.

Mercurio retrógrado funciona como un llamado a bajar la velocidad.

Paso a paso: liberar para avanzar

1. Encender la vela
La vela blanca simboliza claridad y protección. Mirá la llama por unos segundos y enfocá tu intención en limpiar y abrir nuevos caminos.

2. Escribir lo que querés soltar
En el papel, anotá todo lo que sentís que te pesa: pensamientos negativos, vínculos desgastados, situaciones que generan angustia, miedos o trabas. No es para mostrarle a nadie, es un acto íntimo y honesto.

3. Leer y dejar ir
Leé en voz alta lo que escribiste e imaginá cómo cada palabra se desprende de tu vida. Después, quemá el papel en un lugar seguro y dejá que se consuma por completo mientras repetís mentalmente: “Libero todo lo que ya no vibra en armonía conmigo y abro caminos a nuevas oportunidades, claridad y bienestar.”

4. Beber el agua
Tomá un sorbo del vaso. El agua representa renovación. Permití que esa sensación de liviandad recorra tu cuerpo.

5. Sellar la energía (opcional)
Si tenés sahumerio o palo santo, pasalo por tus manos, tu cabeza y alrededor de tu cuerpo para limpiar cualquier resto de energía densa.

Este ritual no promete soluciones instantáneas ni resultados sobrenaturales. Su poder está en la intención, la pausa y la conexión con uno mismo. Mercurio retrógrado obliga a frenar y revisar, y esa pausa, bien utilizada, puede marcar un antes y un después.