Con la llegada del calor, los mosquitos vuelven con todo. En Argentina, donde el dengue y el chikungunya siguen en aumento año tras año, reforzar la prevención es clave para evitar contagios y pasar un verano más tranquilo. Pero para muchas personas, usar repelente puede ser una experiencia incómoda, dado su olor demasiado fuertes, textura pegajosa y sensaciones invasiva, que hace que uno termine evitando el producto, incluso cuando más lo necesita.
La buena noticia es que existen alternativas naturales, libres de tóxicos y con un aroma suave que no solo ahuyentan a los mosquitos, sino que además resultan mucho más amigables de usar en el día a día. Los repelentes naturales pueden ser igual de eficientes si se los utiliza correctamente, y además permiten controlar la intensidad del aroma y evitar ingredientes químicos que pueden generar irritaciones o alergias.
Repelente casero natural: para combatir los mosquitos
Hacer tu propio repelente en casa es sencillo, rápido y no requiere de ingredientes difíciles de conseguir. A continuación te contamos cómo obtener una versión, libre de tóxicos, y con un aroma suave a eucalipto, citronela y lavanda.
Ingredientes
- 1/2 taza de agua destilada o filtrada
- 1/2 taza de alcohol etílico
- 20 gotas de aceite esencial de citronela
- 10 gotas de aceite esencial de lavanda
- 10 gotas de aceite esencial de eucalipto
- Un pulverizador
Preparación
- En el pulverizador, mezclá el agua con el alcohol.
- Sumá primero la citronela, luego la lavanda y finalmente el eucalipto.
- Cerrá el frasco y agitá enérgicamente para integrar todos los ingredientes.
- Guardalo en un lugar fresco y aplicalo cada 2 a 3 horas, especialmente si estás al aire libre.
Lo mejor de todo es que, además de tener un efecto repelente, gracias a las características de la citronela, el eucalipto y la lavanda, esta preparación casera tiene beneficios antibacterianos y relajantes.
MÁS INFO
En caso de menores y personas con sensibilidad o afecciones en la piel, consultar con un especialista en dermatología o pediatría antes de colocar cualquier tipo de producto en la piel, por más libre de tóxicos que esté. Aclarado esto, podés disfrutar de un repelente que no te va a generar rechazo por su aroma intenso, y que además te va a proteger de los mosquitos que año tras año reaparecen más resistentes.
