En las últimas 48 horas, la basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano, fue el lugar elegido para dedicarle el último adiós al papa Francisco, fallecido el pasado lunes. Entre los miles de asistentes, se destacó la presencia de dos jugadores de la Selección Argentina, que no dudaron en ir a despedir al último sacerdote de la Iglesia Católica.
Como parte de la delegación del club Roma de Italia, Leandro Paredes y Paulo Dybala estuvieron presentes en la visita a la basílica para despedir los restos de Jorge Bergoglio, el último encuentro público previo al funeral del sábado. Además, también estuvo Matías Soulé, el otro argentino del club romano que también formó parte del seleccionado dirigido por Lionel Scaloni.
Una vez finalizada la cita, el plantel de "La Loba" se dirigió hacia las instalaciones del club para realizar una última sesión de entrenamiento, pensando en el duelo determinante que afrontarán el próximo fin de semana ante el Inter de Lautaro Martínez, líder absoluto de la Serie A.
Para dicho encuentro por el torneo local italiano está estipulado un homenaje a Francisco, al igual que el resto de los partidos de todo el fútbol profesional de Italia. Incluso, en el último partido de los "Neroazzurri", en el clásico ante el Milan por la Copa Italia, en el estadio San Siro se realizó un sentido homenaje hacia el exobispo argentino.
Murió el papa Francisco: quiénes asistirán a su funeral
Poco después del fallecimiento del Papa comienza el llamado Novendiale, nueve días de solemnes misas diarias por los difuntos en la Basílica de San Pedro. De esta manera, el entierro del papa Francisco debe tener lugar a los seis días, de modo que el cuerpo de Jorge Bergoglio será sepultado este sábado. La lista de jefes de Estado y de gobierno, así como de responsables políticos que confirmaron su asistencia a la ciudad de Roma para despedir los restos del Sumo Pontífice fue creciendo.
Los restos del Papa fueron trasladados este miércoles en medio de una multitud desde la capilla de Santa Marta, la que fue su residencia, hacia la Basílica de San Pedro, donde fieles de todo el mundo le dieron el último adiós. El presidente argentino, Javier Milei, partirá rumbo al Vaticano este jueves a las 22 y estará acompañado por siete funcionarios de alto rango, como nunca antes: su hermana y Secretaria General de Presidencia, Karina Milei; su vocero Manuel Adorni; la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello; la de Seguridad, Patricia Bullrich; el Canciller Gerardo Werthein; su jefe de Gabinete, Guillermo Francos; y el secretario de Culto y Civilización, Nahuel Sotelo.
Además, asistirán el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y la primera dama, Janja, así como el mandatario de Ecuador, Daniel Noboa. El mandatario estadounidense, Donald Trump, junto a su esposa, Melania, también dirán presente. Será la primera vez que un presidente estadounidense en funciones asista al funeral de un Papa desde que George W. Bush participó en las exequias de Juan Pablo II en 2005.
El funeral en memoria del primer Papa argentino, latinoamericano y jesuita reunirá a Trump con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, por primera vez desde su discusión en marzo en la Casa Blanca, en la que se puso de manifiesto la nueva postura en Washington con respecto a la guerra que mantiene el país ucraniano con Rusia.
La comitiva de Italia estará encabezada por el presidente Sergio Mattarella y la primera ministra Giorgia Meloni, quienes ya han confirmado su asistencia. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, encabezará la comitiva que comparte junto al ministro de Relaciones Exteriores Jean Noël Barrot y el ministro del Interior Bruno Retailleau.
En tanto, el mandatario ruso, Vladimir Putin, no tiene planes de acudir al entierro del Papa, aunque lamentó su muerte al señalar la "gran autoridad internacional" con que contaba y asegurar que fue "una persona excepcional". El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó en su rueda de prensa telefónica diaria la decisión de Putin: "No, el presidente no tiene tales planes", dijo.
Otro que no dirá presente en Roma para despedir al Sumo Pontífice es el presidente de España, Pedro Sánchez. La delegación española estará encabezada por el rey Felipe IV y la reina Letizia, acompañados de las vicepresidentas María Jesús Montero y Yolanda Díaz, el ministro de relaciones con la Santa Sede, Félix Bolaños, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.