El consumo masivo repuntó levemente en octubre, pero se mantiene abajo en el acumulado de lo que va del año en los principales canales, y sigue muy abajo respecto las cifras históricas de la era pre Milei.
Así lo mostró el último informe de la consultora especializada Scentia, que reveló que las ventas de alimentos, artículos de limpieza e higiene siguieron por debajo de 2024 tanto en supermercados como en autoservicios barriales y mayoristas.
Concretamente, la presentación precisó que el consumo masivo creció un 2,2% en octubre de 2025 respecto al mismo mes de 2024. Se trata del octavo mes seguido en el que este indicador sube en el registro interanual, por la comparación con los meses de depresión del poder adquisitivo tras el ajuste de shock aplicado por Javier Milei a inicios de su gobierno.
Sin embargo, un enfoque más fino permite ver que la situación dista de ser buena. El incremento de poco más de dos puntos contrasta con el desplome de un 16,5% en octubre de 2024, evidenciando un amesetamiento en un nivel muy inferior al de 2023 y años anteriores.
También contrasta con las subas de casi un 6% interanual en agosto y septiembre previos, en consonancia con la progresiva recuperación de la actividad en el segundo semestre del año pasado. Así, la cifra de octubre puede anticipar una serie de indicadores positivos pero modestos en los próximos meses.
En el registro intermensual, el consumo masivo creció en octubre un 3,2% respecto a septiembre. Aunque efectivamente indica una variación positiva en términos reales, esta cifra está sobredimensionada por el día extra que tiene el mes pasado, aclaró Scentia.
MÁS INFO
El consumo masivo sigue abajo en supermercados, almacenes y mayoristas
Por su parte, el desagregado de los principales canales de consumo -supermercados, autoservicios y mayoristas-, indica una situación dispar, pero una baja generalizada en lo que va del año respecto al previo.
El canal que peor performance muestra es, nuevamente, el de los grandes supermercados, que cayeron un 4% en el registro interanual y, aunque subieron un 6,9% respecto a septiembre, en el año acumulan una caída de 5,1% respecto al período enero-octubre de 2024.
Se trata del efecto de la baja de la inflación, que lleva a que sea menos necesario stockearse mediante grandes compras. Pero, al mismo tiempo, es producto de la baja del poder adquisitivo, que dificulta la posibilidad misma de afrontar compras abultadas, lo que hacer que el consumidor prefiera el comercio de cercanía por una cuestión de comodidad.
Esto indica un desplazamiento de canales en favor de los autoservicios independientes de barrio, como se refleja en la suba de un 6,9% interanual y de un 5,7% intermensual en estos comercios. Aun así, su escenario sigue siendo relativamente negativo, ya que en el acumulado del año siguen un 0,5% por debajo respecto al período enero-octubre de 2024.
En este sentido, no es auspiciosa la situación de los mayoristas, que en el registro interanual tuvieron una caída todavía peor que la de los supermercados, de un 4,9% respecto a octubre de 2024. Esta baja no se debe a un gran mes del año pasado, en el que la inflación ya era relativamente baja (2,7%), lo que puede señalar que la causa debe buscarse en la coyuntura actual. Pese al aumento de un 12,9% intermensual, el acumulado de lo que va del año totaliza una caída del 5,3% respecto al acumulado del año pasado.
Básicamente, el informe revela que el consumo nunca logró despegar hasta las elecciones. La incógnita es si los indicadores comenzarán a mejorar a partir de la pretensión oficial de levantar levemente el ajuste o si el período de amesetamiento seguirá en la segunda etapa del gobierno de Milei.
