El consumo en las grandes cadenas de supermercados sigue cayendo en lo que va de mayo y va camino a cerrar su 17° mes consecutivo en baja. Aun así, las ventas empiezan a mostrar recuperación tanto en los almacenes barriales como en mayoristas y farmacias.
En abril, el consumo total de alimentos, bebidas, limpieza e higiene dejó de caer por primera vez tras 15 meses. Se trató, de este modo, del primer dato positivo en la era de Javier Milei, aunque la suba fue apenas perceptible, ya que creció solo un 0,1% respecto a abril de 2024.
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Ello no fue casualidad, ya que la base de comparación de abril de 2025 era especialmente baja. Ello se debe a que en abril de 2024 se produjeron los grandes tarifazos de luz y gas, con subas de entre el 150% y el 300% en estos servicios. Por lo tanto, el consumidor contó ese mes con menos resto para gastar en supermercados y almacenes, lo que llevó a un desplome interanual del 13,8% respecto a abril de 2023, casi el doble que la caída de marzo de 2024.
En mayo de 2024, sin embargo, la caída había vuelto a desacelerarse hasta el 9,9% interanual, por lo que era posible que el dato de mayo de este año volviera a ser negativo. Ahora, esta hipótesis parece comprobarse, al menos temporariamente.
El consumo masivo en lo que va de mayo
Fuentes cercanas el sector supermercadista anticiparon a El Destape que, en lo que va de mayo (tomando algo más que las primeras dos semanas del mes), el consumo en las grandes cadenas sigue siendo bajo y presenta todavía una cifra negativa respecto a su equivalente en mayo de 2024.
Al contrario, las fuentes señalaron que otros canales ya presentan signos de recuperación en la comparación interanual. Se trata del consumo en almacenes barriales, mayoristas, el comercio on line y las farmacias.
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Se repite así la tendencia de abril. Si se compara mayo con el dato de Scentia del mes pasado, pese al total apenas positivo, el desagregado mostró un aumento interanual en el consumo en autoservicios de barrio (almacenes) del 3,1%, pero una baja interanual del consumo en grandes cadenas de supermercados de 2,9%. También, en la medición de la misma consultora, habían dado positivo en abril las ventas en los mayoristas (0,2%) y las farmacias (13%). El cambio de tendencia está en el e-commerce, que en abril fue negativo en 0,6% interanual pero en mayo, según fuentes del sector, viene mostrando una tendencia positiva.
Ahora, resta saberse si la suba de los almacenes de barrio en mayo alcanzará para compensar la baja de los supermercados en lo que va del mes. O si, como indica la desaceleración de la caída en 2024 (bajó 9,9% contra la baja del 13% en abril), el piso superior hará que en mayo se vuelva a la tendencia negativa.
Esta tendencia divergente entre comercios de barrio y supermercados tiene como explicación un fenómeno real de fondo. Respecto a abril pasado, desde Scentia explicaron a El Destape que lo que ocurre es que, por el poco resto en el bolsillo, el consumidor privilegia ahora hacer varias compras más chicas y controladas, por lo que los comercios de barrio se benefician por su cercanía pese a frecuentemente ser un poco más caros. Esto explica, a su vez, los números positivos de los mayoristas, que los suplen.
Al contrario, agregaron, los grandes supermercados se ven perjudicados por la imposibilidad de la gente de realizar grandes compras mensuales o quincenales, una tendencia que ya lleva varios años pero que ahora continúa profundizándose. Las bajas ventas en las cadenas se perciben especialmente en los días sin promociones.