El banco estadounidense JP Morgan estima que Argentina podría acumular reservas por debajo del 1% del PBI en 2026 al remarcar que debe ser una prioridad del gobierno de Javier Milei y espera las mejores perspectivas de crecimiento y desinflación de la gestión. La entidad financiera compartió un informe en el que remarcó la necesidad de sumar reservas aprovechando el mejor escenario político tras las elecciones legislativas y el respaldo financiero de Estados Unidos, proyectando un escenario optimista para el próximo calendario.
El análisis explicó que “si el esquema cambiario se sostiene, el sector público podría acumular reservas, aunque probablemente por debajo del 1% del PBI”. La entidad, cuna laboral de casi todo el equipo económico que lidera el ministro Luis Caputo, precisó que las reservas brutas tienen un margen para aumentar 5.000 millones de dólares durante el año, contemplando un tipo de cambio real por debajo del promedio histórico. Sin embargo, planteó que un tipo de cambio real más alto o mayores ingresos financieros podrían generar una mayor suba de las reservas.
El JP Morgan expresó que “la lección para 2026 es clara: aumentar las reservas debe ser una prioridad para fortalecer las defensas del país antes de las elecciones generales de 2027”, indicando que “el aval estadounidense debería utilizarse estratégicamente y con urgencia para construir colchones internos”.
Por su parte, el equipo de research del gigante financiero Citi publicó un informe sobre Argentina, en el que considera que "se requiere un aumento de las reservas internacionales, reformas estructurales y el fin de los controles cambiarios". La necesidad de incrementar reservas es un pedido que vienen haciendo distintos actores de mercado, local e internacional.
Entre el apoyo y los deberes
Con respecto al apoyo de la administración de Donald Trump, remarcó que “expuso una vulnerabilidad crítica: la fuga de capitales del peso hacia el dólar, motivada por el riesgo político, no puede sostenerse sin antes reponer reservas internacionales”. En relación con las proyecciones para el nuevo calendario, el banco estadounidense aseguró que “de cara al futuro, 2026 será un año crucial para el gobierno de Milei”, al resaltar que “con apoyo probable del Congreso para las reformas, las perspectivas de crecimiento y desinflación son mejores que en cualquier otro momento desde que Milei asumió el cargo”.
Sobre la variación de precios, señaló que “el tipo de cambio se incrementó 21% en tres meses, pero la inflación mensual apenas se movió”, destacando que “el proceso de estabilización sorteó una prueba exigente y salió ileso” y pronosticó que “todo indica que la desinflación continuará”. En base a estabilidad del tipo de cambio real y avance de las reformas, la entidad prevé que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) se reducirá a 1,5% en el primer semestre y a 1,1% en el segundo, lo que acumularía una inflación del 17%.
En cuento a inversiones y acceso a mercados internacionales, rescató que “el respaldo financiero de Estados Unidos y un nuevo acuerdo comercial pueden catalizar inversiones directas en sectores estratégicos, mientras que el acceso mejorado a los mercados, mediante operaciones de manejo de pasivos o recompras de deuda, parece cada vez más probable”. En ese sentido, el JP Morgan expresó que “en el ámbito externo, se prevé que el Tesoro implemente operaciones de gestión de pasivos para aliviar el servicio de deuda externa de 2027, recuperando el acceso a los mercados en 2026” y subrayó que “esto proveería otra fuente de resiliencia para el año electoral”.
Al mismo tiempo, aseveró que “la reactivación de la demanda interna debería permitir que la economía recupere dinamismo” ya afirmó que “para 2026, proyectamos un presupuesto equilibrado, con el superávit primario (1,5 por ciento del PIB) compensando los pagos de intereses”.
Al respecto, puntualizó que “nuestro pronóstico incorpora un aumento de 0,4 puntos porcentuales en el total de ingresos, favorecido por la recuperación de la actividad y buenas perspectivas agrícolas” y agregó que “este aumento será contrapesado por mayores gastos, por una recuperación real de 3% en jubilaciones y una suba en transferencias a provincias”. El banco norteamericano indicó que “por el lado financiero, anticipamos un creciente superávit de cuenta financiera de 12.700 millones de dólares, impulsado por mayor inversión extranjera directa y entrada de capitales de cartera, así como menores compras de activos externos ante una menor prima de riesgo político”.
En los últimos meses, la Argentina fue escenario de reuniones de los principales directivos del JP Morgan con funcionarios argentinos. En particular, a días de las elecciones legislativas nacionales en señal de apoyo a La Libertad Avanza. En octubre de 2025, JPMorgan organizó un evento en Buenos Aires al que asistió su director ejecutivo, Jamie Dimon. El encuentro fue destacado por el Gobierno y por medios nacionales e internacionales como un gesto público de acercamiento entre el presidente y Wall Street. Sin embargo, el apoyo político no impidió el arribo de críticas sobre la pericia económica del mileismo.
