Warren Buffett dijo el sábado que dejará el cargo de CEO de Berkshire Hathaway a finales de año, y que cederá las riendas al vicepresidente Greg Abel.
"Creo que ha llegado el momento de que Greg se convierta en jefe de la empresa a finales de año", dijo Buffett, de 94 años, en la reunión anual de accionistas de Berkshire.
Señaló que Abel no había estado al tanto de sus planes antes del anuncio y agregó dijo que no tenía "ninguna" intención de vender ninguna de sus acciones de Berkshire.
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La decisión de Buffett de dimitir pone fin a una notable carrera de 60 años en la que transformó Berkshire de una empresa textil en decadencia en un enorme conglomerado con negocios en toda la economía estadounidense.
La noticia fue inesperada, aunque Buffett dijo que había comunicado la decisión a sus hijos.
Mientras que las acciones de Berkshire subieron un 5.502.284% entre 1965 y 2024, Buffett nunca se mudó de una casa por la que pagó 31.500 dólares en 1958.
La fortuna de Buffett asciende a 168.200 millones de dólares, según la revista Forbes, y habría sido mucho mayor si no hubiera donado desde 2006 más de la mitad de sus acciones de Berkshire a obras benéficas.
Se espera que casi todo el resto se destine a un nuevo fideicomiso benéfico supervisado por su hija Susie y sus hijos Howard y Peter.
Abel, de 62 años, ha sido vicepresidente de Berkshire desde 2018, y desde 2021 se daba por descontado que sería el sucesor de Buffett.
Con información de Reuters
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