De YouTube a la política: quién es Johannes Káiser, el influencer de extrema derecha chileno que pretende ser presidente

Tiene 49 años y es la oferta más joven y extrema que presenta la derecha chilena para estas elecciones presidenciales. Se hizo conocido por su canal de YouTube, militó para José Antonio Kast y después de distanciarse de él, creó su propio partido.

02 de octubre, 2025 | 00.05

Johannes Káiser es malhablado, contradictorio y extravagante. Su abuelo fue un socialdemócrata alemán perseguido por los nazis que vio en Chile una oportunidad de hacer una nueva vida y que llegó a ser alcalde de Villarrica, una ciudad de la Araucanía chilena, en el Sur. Su papá, empresario y abogado, se dedicó a los negocios a la par que fue militante de la Unión Demócrata Independiente (UDI), un partido de derecha creado para aglutinar a los simpatizantes del pinochetismo en años democráticos tras el fin de la dictadura. Johannes es tercera generación de activistas políticos en la familia Káiser, aunque en las antípodas de su abuelo inmigrante: fundó su propio partido, el Nacional Libertario, y hoy es el candidato a presidente de Chile con posiciones más extremas. Entre otras cosas propone recortar el gasto fiscal un 5% del PIB, retroceder con la reforma previsional promulgada por el gobierno de Gabriel Boric y flexibilizar los contratos para facilitar los despidos a los empleadores. Además, defiende la represión de Pinochet, apoyaría un nuevo golpe de Estado y celebra las violaciones de mujeres.

Es el mayor de seis hermanos. Con dos de ellos comparte vocación política. Su hermana Vanessa, periodista y también youtuber, escribió artículos y libros en contra del progresismo, además de elogios al liberalismo conservador. Llegó a definir al liberalismo como el “verdadero salvador de la sociedad”. En la pandemia, se afilió al Partido Republicano de José Antonio Kast por el que llegó a ser electa concejala en Las Condes durante un año, cargo al que renunció por presuntos motivos personales. El otro hermano metido en política es Axel, un autodefinido intelectual de la derecha chilena que aparte de escribir odas al libre mercado, es abogado y presidente de la Fundación para el Progreso, un think tank de derecha con presencia en toda América Latina. Está implicado en el caso $Libra, dado que hasta febrero de 2025 figuraba como vicepresidente de la Fundación Faro, una entidad asociada al cripto escándalo por la presunta relación entre Agustín Laje y Mauricio Novelli, el propulsor de la cripto moneda que promovió Javier Milei a principios de este año. El otro trío de hermanos si bien comparte la visión liberal de los políticos, se dedican a los negocios y a las empresas heredadas del clan familiar.

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De familia nómade por los negocios, Johannes pasó por varias escuelas con un denominador común: todas alemanas. Empezó en el Colegio Alemán Sankt Thomas Morus y, al igual que José Antonio Kast y Evelyn Matthei, también pasó por el Colegio Alemán de Santiago y, posteriormente, por las escuelas alemanas de Villarrica y Temuco, todas ellas a medida que se mudó con su familia a cada localidad. Sin embargo sus estudios los terminó en el Colegio Militar Bernardo O’Higgins, donde cumplió con el servicio militar voluntario. “Todos los políticos deberían pasar por esa experiencia”, diría años después.

Copió la vida errante de sus padres durante sus estudios superiores: carrera que empezó, carrera que abandonó. En 1995 se anotó a estudiar Derecho en la Universidad Finis Terrae de Santiago, de la cual desistió tiempo después, cuando decidió cambiar de rumbo y mudarse a Alemania para estudiar en la Universidad de Heidelberg, donde ni siquiera empezó a cursar porque antes de ingresar se trasladó a Innsbruck, Austria. Allí trabajó de mozo, de albañil, de vendedor de autos en una concesionaria y hasta de vendedor de cigarrillos. Llegó a trabajar como periodista freelance, supuestamente, para cubrir al Wacker Innsbruck, el club de la ciudad.

Sin embargo, su voluntad académica habitó en él durante su estancia en Austria. Cómo él mismo reveló en su autobiografía disponible en su sitio web, estuvo 14 años matriculado en la Universidad de Innsbruck donde pasó por las carreras de Derecho, Historia y Ciencia Política. Spoiler: no terminó ninguna. “Hoy un título universitario lo consigue cualquiera a costa de la calidad de formación” respondió a las críticas que recibió en X por su inconcluso historial académico.

Johannes Káiser en uno de sus videos de YouTube filmados en su casa.

Militancia política

Su debut militante fue en la UDI como su padre, aunque no alcanzó a hacer carrera dentro del partido. Se fue a los pocos años, con críticas al presunto cambio de rumbo que tomó el espacio.

Su activismo se hizo fuerte cuando, una noche de septiembre de 2013 en la que “estaba aburrido” como contó años después, y creó su propio canal de YouTube para hablar de política y hacer críticas al gobierno de turno. Con el tiempo su trinchera digital pasó a llamarse “El Nacional-Libertario” y en poco tiempo superó los cien mil seguidores activos. Desde allí, creó un asiduo grupo de fieles que lo alentaron a asumir compromisos políticos más notorios. Decidió acercarse a un derechista en ascenso, hasta entonces medianamente conocido, que también fue parte de la UDI y con el que compartía su visión sobre los años del régimen depuesto en 1990: José Antonio Kast. En la campaña de 2017, la primera presidencial en la que Kast participó, Káiser hizo campaña por él en redes sociales. Su flamante candidato apenas sacó el 7%, pero ya había conquistado su corazón.

Cuando Kast crea en 2018 el movimiento de Acción Republicana y en 2019 el Partido Republicano, Káiser fue uno de los primeros en afiliarse. A partir del estallido social que arrasó en Chile en ese último año, la fuerza política de su admirado dirigente comenzó a erigirse como la nueva opción de la derecha conservadora en el país, a la par que Chile Vamos y Sebastián Piñera caían en picada tanto en imagen como en respaldo popular. Káiser fue confirmado como candidato a diputado en las elecciones de 2021, banca que ganó al superar el piso necesario con algo más de 26.000 votos.

Sin embargo corrió riesgo de no asumir: tres días después de las elecciones generales, el propio Kast anunció que Káiser sería sometido al comité disciplinario del Partido Republicano, al hacerse viral un video suyo criticando al voto femenino. “Las mujeres salen a trotar por la calle con miedo a que un inmigrante las viole. Sin embargo, esas mismas mujeres van y votan a los mismos partidos que permiten el ingreso de esos inmigrantes. Ahí es cuando te preguntas si el voto femenino fue realmente una buena idea”, dijo el flamante diputado electo. Antes de que el comité disciplinario emitiera una resolución, el propio Káiser renunció al partido. Asumió su banca como independiente, sin respaldo oficial.

Johannes Káiser junto con José Antonio Kast, hace algunos años.

Sin embargo, meses después de asumir su banca, más precisamente en septiembre de 2022, se confirmó su reincorporación a los republicanos. Pero no dejaría de estar atado a polémicas. En 2023, por motivo del plebiscito de la reforma constitucional que convocó el presidente Gabriel Boric, el reincorporado Káiser afirmó que votaría en contra de reformar la Carta Magna, pero que no haría campaña por respeto a la voluntad de su partido -los republicanos querían la reforma, aunque a diferencia de Boric, para darle un tinte más liberal que el heredado de Augusto Pinochet en 1990-.

El comité disciplinario esta vez sí sancionó al diputado, removiéndolo de todas las comisiones parlamentarias que integraba representando al bloque. Finalmente, Johannes Káiser renunció, por segunda vez, al Partido Republicano. “Yo defiendo mis principios en toda circunstancia” fue su defensa ante la pregunta del periodista Thomas Moschiatti en De frente, respecto a su segunda salida del espacio republicano.

A principios de 2024 manifestó su interés de candidatearse a presidente de Chile. Junto con los diputados Gonzalo de la Carrera, Gloria Naveillán, Cristóbal Urruticoechea, Leónidas Romer y Cristián Labbé Martínez, todos provenientes de la UDI y del Partido Republicano, el 7 de junio largó la búsqueda de firmas para inscribir y crear al Partido Nacional Libertario, lo cual consiguió el 12 de junio. Junto a ellos logró consolidar una bancada inicial de seis diputados para su nuevo partido.

Polémicas

Aparte de sus declaraciones sobre el voto femenino, también habló de otorgar medallas a los violadores de las “mujeres feas”: “Todos los que hayan violado a mujeres feas deberían recibir una medalla de honor”, dijo el flamante diputado en una transmisión hecha en su canal de YouTube. Este mismo año volvió a desatar el repudio de buena parte del arco político chileno cuando dijo en un reportaje para Tolerancia Cero que "desde el punto de vista ético y moral lo correcto sería no matar a la guagua, sino fusilar al violador".

También el diputado despertó cruces en todos los frentes cuando, en 2021, dijo en su canal de YouTube que “en Chile se fusiló poco” durante el régimen de Pinochet y que los muertos del caso Pisagua -un centro clandestino de la dictadura, ubicado en la localidad de Pisagua, al norte del país-, “estaban bien fusilados”. La Corte de Santiago ordenó a Káiser borrar ese video por incitación al odio y a la violencia, a partir de la denuncia de la hermana de uno de los desaparecidos en el caso.

Quizá la polémica más reciente que encarnó el aspirante a presidente fue cuando este mismo año, en la entrevista en De Frente con Tomás Moschiatti, afirmó que él “apoyaría un nuevo golpe de Estado” como el del 11 de septiembre de 1973, si las condiciones de ese mismo año se repitieran hoy. “Sin duda, absolutamente”, respondió ante la repregunta del periodista. En esa misma nota dijo que, en caso de llegar al poder, proscribiría al Partido Comunista de Chile por “el enorme daño que le hizo a la democracia chilena”.

El pico de intención de voto de Johannes Káiser alcanzó apenas el 11%. Tras el primer debate presidencial del 10 de septiembre, la mayoría de las encuestadoras lo congelaron en un sólido 10%, posicionado como la tercera opción dentro de las cuatro variantes de la derecha chilena para estas elecciones. Sin embargo, él se siente optimista: cree que llegará a disputar la segunda vuelta con su ex padrino político José Antonio Kast. Y aunque no lo dijo expresamente, se calcula que en caso de no llegar a la segunda vuelta, pero Kast sí, llamará a votar por el republicano. No descarta incluso incorporarse a un hipotético gobierno de Kast, en caso de que gane las presidenciales.