Avance de la derecha en la región llega a Colombia: Uribe y nuevos liderazgos desafían a Petro y la izquierda

El balotaje en Chile abre un escenario para un posible cambio de gobierno en Colombia. Petro mantiene una dura disputa con Donald Trump, quien lo acusó de narcotraficante. El tercio de colombianos que apoyan su proyecto no parece suficiente como para que logre imponer un candidato competitivo.

22 de noviembre, 2025 | 00.05

La primera vuelta en Chile y las chances de victoria de la extrema derecha en la segunda vuelta del 14 de diciembre potencian la idea de un cambio de gobierno en Colombia. El presidente Gustavo Petro ha pasado momentos de tensión en estos años de gestión desde que el primer año se rompió la alianza parlamentaria con los dos partidos históricos, el Partido Liberal y el Conservador, que le hizo cuesta arriba la aprobación de sus reformas.

El líder colombiano también tuvo fisuras internas en su gabinete a punto tal que decidió transmitir en vivo una reunión de gabinete que generó una crisis profunda que generó la renuncia de muchos de sus ministros.

Ahora, la agenda está marcada por la disputa con Donald Trump y su acusación a Petro de narcotraficante que le valió la suspensión de la visa para el ingreso a Estados Unidos. El estilo verborrágico y tuitero del líder colombiano es vidrioso y produce amores y odios.

En ese sentido, el tercio de colombianos que apoyan su proyecto y lo acompañan en sus batallas no parece suficiente como para que el jefe de estado logre imponer un candidato competitivo.

La encuesta de Atlas Intel de octubre muestra un rechazo al gobierno del 58 por ciento y un respaldo del 38,7. En relación a la imagen de Petro, la consultora brasileña ubica la negativa en 61 por ciento contra un 29 de positiva. Además, los seis primeros líderes con mejor imagen del país son todos de derecha, encabezado por Alvaro Uribe.

El abogado, analista y profesor de la Universidad Externado de Colombia, Jorge Cuervo, dijo a El Destape que "el mapa de la derecha en Colombia se divide en tres escenarios: el uribismo con el partido Centro Democrático bajo el liderazgo del expresidente Álvaro, una derecha que llamaríamos tradicional, institucional, en el que caben figuras como Germán Vargas Lleras, el expresidente César Gaviria y algunos exministros de gobiernos de derecha que le apuestan un poco al tema de las instituciones y ha surgido una figura outsider como Abelardo de la Espriella, un abogado litigante exitoso con clientes llamativos que se ha conectado con estos nuevos lenguajes disruptivos de las redes sociales. Entonces, él tiene cosas de Nayib Bukele, de Milei, tiene cosas así como disruptivas y se ha conectado con esos sectores de la sociedad que están buscando respuestas que la derecha tradicional no les da frente al tema libertad, identidades, seguridad".

En relación al factor Trump, Cuervo sostiene que "todavía no se ve que sea muy claro, que influya. Sin embargo, lo que uno ve es que curiosamente en las últimas semanas ha habido repunte de la favorabilidad en favor del presidente Petro. Eso puede estar relacionado con el hecho de la confrontación verbal que él tiene y las sanciones de que ha sido objeto de incluirse en la lista de Clinton, quitarle la visa. Yo creo que eso ha tocado ah una vena nacionalista".

"Esas tres derechas, en el fondo, se alegran de las sanciones a Colombia y al presidente Petro. Pero tal vez solo de la Espriella se atreva a decirlo en público. Los otros son más más cautos en ese sentido, saben que las relaciones binacionales se pueden recomponer con otro gobierno pero tampoco tiene que descuidar su capital político. Ese tema nacionalista puede ser muy sensible, entonces, de dientes para afuera creo que se hacen llamadas a la institucionalidad a restablecer el diálogo binacional, pero en el fondo se alegran de que eso haya pasado. Pero no se atreven a decirlo explícitamente", agrega.

Sobre el rol del liderazgo de Álvaro Uribe en el armado de la derecha, Cuervo considera que "sigue siendo importante en el Centro Democrático pero creo que es un liderazgo desgastado, no solo por el tiempo sino por el desgaste que implicó su proceso judicial, pero también porque Uribe no ha permitido nuevos liderazgos en su sector. Creo que ese estilo tan personalista del ejercicio del poder ya demuestra desgaste, por lo que yo creo que él va a tener fuerza para elegir o decidir quién es el candidato de su sector".

Para Jorge Cuervo, Uribe se erige como el inminente "armador" de la derecha colombiana para 2026.

Cuervo remarca que "en las últimas encuestas ha mejorado la favorabilidad del presidente con el 42 por ciento que comparado con otros presidentes al final de su per es un muy buen porcentaje de aprobación. Eso es un buen punto de partida para de apoyo al proyecto político que en este caso representa el senador Iván Cepeda. La derecha y los medios se han equivocado apostándole a una defenestración de la imagen del presidente por todos sus temas personales, por su estilo, por su retórica tóxica a veces en el lenguaje público, pero sus seguidores, su base electoral sigue firme con él y seguramente hay mucha gente que ha entendido que esos ataques, ahora sumados a los del gobierno de Trump, pues son injustos y en ese sentido su imagen ha venido mejorando".

En este contexto, Cuervo señala que "no hablaría de un solo favorito". "Yo creo que está claro que el candidato del oficialismo que hoy está en el poder, que encarna Iván Cepeda, salió con muy buena legitimidad de esa consulta interna que hicieron y creo que ese candidato tiene muchas posibilidades de estar en la segunda vuelta y la discusión va a estar en quién acompaña a ese candidato en segunda vuelta. La derecha está fracturada en este momento . Y quien está mejor en las encuestas es Abelardo de la Espriella, pero él incomoda muchísimo en sectores tradicionales e institucionales de la derecha y se puede ir desinflando con el paso del tiempo".  

"Un sector de la derecha muy marginal mantiene contactos con ese sector radical del gobierno de Trump reflejado en Marco Rubio o en Díaz-Balart y Bernie Moreno, pero son minorías dentro del Partido Republicano muy radicalizadas por el tema Cuba y por el tema Venezuela", asegura.

Por otra parte, Jorge Restrepo, Profesor de Economía de la Pontificia Universidad Javeriana, aporta los nombres de los ex ministros Mauricio Cárdenas; el de David Luna, un ex concejal de Bogotá; y el de Juan Daniel Oviedo como candidatos posibles de la derecha. Hay otros nombres como el ex alcalde de Bogotá Enrique Peñalosa que todavía no tiene decidido sumarse a esta coalición o a otras, son candidatos que tienen digamos una menor favorabilidad popular”.

"Después están más hacia la derecha se destacan Paloma Valencia, Paola Holguín, María Fernanda Cabal, digamos que aparecen de los tres más extremas. Es interesante que son tres mujeres y en la extrema derecha", añade.

Sobre Abelardo de la Espriella, Restrepo dice que "hay desconfianza porque ha defendido a un ministro del gobierno del régimen de Venezuela, el señor Alex Saab que pues tiene todo tipo de acusaciones de crimen organizado por parte de los Estados Unidos, que fue procesado allá y acusado ante las cortes y después entregado a Estados Unidos. También ha defendido otros condenados por narcotráfico y muchas personas condenadas por corrupción. Ese es el papel de los abogados defensores, pero en un país que tiene una criminalidad organizada tan grande, pues desata muchas preguntas".

"El factor Trump no influye en los liderazgos que se impongan. Obviamente hay muchos que quieren emularlo a él, tanto en la manera en la que hace comunicación política, como en presentarse como un candidato antisistema que destruye el sistema anti-institución", resalta.

Por último, Jorge Restrepo, advierte que "Álvaro Uribe tiene un papel cada vez más importante, no tanto en términos de votos, sino de la autoridad política que él tiene, tanto en las listas al Congreso o de su partido que estando en oposición es probable que tenga una mayor favorabilidad que en la anterior elección y también en la selección de un candidato que pueda llegar a competir en marzo en una consulta con otros candidatos”.

"Entonces definitivamente, tiene una creciente capacidad de influencia política que también dependerá si se concreta en las decisiones que tome y en la capacidad que él tome. De hecho, en el Centro Democrático para la selección Interna de candidatos no hay un mecanismo de votación popular, sino que van a hacer algún tipo de encuesta o si va a ser simplemente la autoridad del presidente sobre el partido la que lo elija. Pero en cualquier caso la decisión que él toma va a ser importante. Si comete un error, pues eso va a ir en contravida de una derecha institucional y podría favorecer a la derecha extremista y liberal", concluye.

En caso de concretarse la victoria de José Antonio Kast en Chile, el mapa regional empieza a configurarse en favor de los intereses de Estados Unidos que ya tiene en Milei un aliado incondicional y espera sumar al paraguayo Santiago Peña, el boliviano Rodrigo Paz Pereira y quien resulte ganador en Colombia. En el progresismo, por el contrario, apuestan todo a la reelección de Lula como punto de apoyo para seguir disputando la hegemonía de una región que también mira con preocupación la posibilidad de una escalada en Venezuela.