La Corte Constitucional de Colombia decidió el martes por unanimidad que una reforma al sistema pensional aprobada por el Congreso en el 2024 deberá ser sometida a discusión y votación nuevamente en la Cámara de Representantes para subsanar un vicio de procedimiento que permita su implementación.
El fallo aplaza la entrada en vigencia de la ley sobre la que la Corte Constitucional deberá decidir definitivamente su legalidad en el futuro.
La reforma, que entraba en vigor en julio de este año, fue demandada con el argumento de que la cámara autorizó el texto aprobado por el Senado sin un debate de fondo.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
La decisión ordena "al presidente de la Cámara de Representantes que, con el propósito de subsanar el vicio de procedimiento en el que se incurrió en el trámite de la ley (...) de nuevo someta a discusión y votación de la Plenaria de la Cámara de Representantes" en un plazo máximo de 30 días hábiles.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, dijo en su cuenta de X que la reforma pensional se salvó y solicitó a la Cámara de Representantes discutir a fondo el artículo que aprueba el texto del Senado y aprobarlo.
La reforma busca fortalecer la administradora estatal Colpensiones, reducir los subsidios a las altas jubilaciones, entregar beneficios a las mujeres con hijos y ampliar la cobertura para proteger a los adultos mayores en situación de pobreza.
La iniciativa mantiene en 62 años la edad de pensión para los hombres con 1.300 semanas de aportes y en 57 años para las mujeres, aunque a ellas les reduce hasta 850 las semanas en casos especiales.
El proyecto obliga a todos los colombianos que ganan hasta 2,3 salarios mínimos mensuales, unos 3,2 millones de pesos (799 dólares) a hacer sus aportes de pensión a la estatal Colpensiones. Las personas con salarios por encima de esa suma podrán seleccionar un fondo de pensiones privado para el ahorro individual de los excedentes.
Además, establece la creación de un pilar semicontributivo en el que los hombres mayores de 65 años y las mujeres de 60 que no cumplieron los requisitos para una pensión habiendo cotizado entre 300 y 1.000 semanas, accederán a un beneficio económico.
Un pilar solidario incluido establece que las mujeres mayores de 60 años y los hombres de 65 años en situación de pobreza o vulnerabilidad que no aportaron al sistema recibirán mensualmente una renta de unos 54 dólares.
El Gobierno estima que 2,6 millones de adultos mayores serán beneficiarios hasta que fallezcan, por medio de la renta solidaria.
La reforma establece que los hombres con 900 semanas cotizadas y las mujeres con 750 se les continuarán en el sistema actual, es decir que no estarán obligadas a aportar al fondo estatal una parte de sus ingresos en el caso de que estén en uno privado.
Con información de Reuters