Miles de griegos se concentraron el miércoles en Atenas para exigir una subida salarial que les permita hacer frente al aumento del coste de la vida, y una jornada de huelga dejó los transbordadores atracados en los puertos, los aviones en tierra y los trenes paralizados.
Además de los controladores aéreos, los marinos y los ferroviarios, los trabajadores municipales, de autobuses y de metro de la capital también fueron a la huelga.
Grecia ha salido de una crisis de deuda que duró de 2009 a 2018 y que provocó recortes continuos de salarios y pensiones a cambio de rescates por valor de unos 290.000 millones de euros. El crecimiento económico, previsto para este año en un 2,3%, supera ahora al de otras economías de la eurozona.
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El Gobierno conservador ha aumentado desde 2019 el salario mínimo mensual en un 35% acumulativo, hasta los 880 euros. Sin embargo, muchos hogares todavía luchan por llegar a fin de mes en un contexto de rápido aumento de los costos de los alimentos, la electricidad y la vivienda, dicen los mayores sindicatos de Grecia.
"El salario de los trabajadores solo nos llega para el día 10 o 15 del mes, no puede cubrir las necesidades básicas, como la vivienda y la alimentación, la educación y la salud", dijo la representante de los trabajadores del sector privado, Dina Gkogkaki, de 52 años, que se unió el miércoles a las protestas en la céntrica plaza Sintagma.
La Confederación General de Trabajadores Griegos, que representa a más de dos millones de empleados del sector privado, afirma que los trabajadores griegos están comprando un 10% menos de bienes en comparación con 2019 debido a la inflación y ha pedido aumentos salariales sustanciales y contratos laborales colectivos.
El salario mínimo de Grecia en términos de poder adquisitivo se situó en enero entre los más bajos de la Unión Europea, por detrás de Portugal y Lituania, según datos de Eurostat.
Con 1.342 euros al mes, el salario medio bruto sigue siendo un 10% inferior al de 2010, cuando Grecia suscribió su primer rescate, según datos del Ministerio de Trabajo.
El Gobierno ha prometido elevar el salario mínimo a 950 euros de aquí a 2027, ya que su objetivo es un salario medio bruto mensual de 1.500 euros, más cercano a la media de la UE, pero los gastos mensuales en alimentación, servicios públicos y vivienda han crecido rápidamente.
Con información de Reuters