En una jornada marcada por la movilización al Congreso de distintos sectores afectados por las políticas de Javier Milei, la Cámara de Diputados estuvo a tono y sesionó con una agenda de temas molestos para el Gobierno. La oposición consensuó un proyecto de aumento del 7,2% de las jubilaciones y una actualización del bono, que pasará de 70 a 110 mil pesos. Ambos resultaron aprobados con un importante cantidad de votos, un antecedente a tener en cuenta porque Milei ya anticipó que los vetará. Más ajustada fue la votación de la prórroga de la moratoria previsional, pero resultó una sorpresa. El Congreso necesitará dos tercios para mantener las iniciativas. Pasada la medianoche, también consiguió media sanción la declaración de emergencia en materia de discapacidad, uno de los temas que -junto a la protesta del personal del Hospital Garrahan- conmovió a la sociedad en los últimos días. La reunión de los gobernadores del martes en el CFI junto a esta sesión en Diputados marcan que una porción de la oposición dialoguista ya no se muestra proclive a sostener la motosierra oficial.
El martes a la noche había dudas acerca del quórum porque algunos gobernadores de partidos provinciales que pasaron por la Casa Rosada le anticiparon al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, que no facilitarían a sus diputados. Sin embargo, hubo quórum. Obviamente, los bloques de Unión por la Patria y el Frente de Izquierda estuvieron como siempre. Pero hubo más diputados que lo habitual de las bancadas de Encuentro Federal, Democracia para Siempre y de la Coalición Cívica. Además, algunos gobernadores que habitualmente buscan hacer equilibrio en la relación con el Gobierno, esta vez aportaron más legisladores y terminaron conformando el número que no se había podido alcanzar dos semanas atrás. Por ejemplo, participaron cuatro de los cinco diputados cordobeses alineados con el gobernador Martín Llaryora.
Habilitada la sesión, la oposición buscó apurar la conformación de la comisión investigadora del caso $LIBRA, uno de los temas que el oficialismo tiene en su lista negra. Hasta ahora, consiguieron que la comisión nunca termine de armarse por las diferencias en torno a su composición. Este miércoles, el presidente de la Cámara, Martín Menem, invocó diferentes cuestiones reglamentarias para impedir que la oposición avanzara en un debate que se extendió por dos horas. "Si Javier Milei y Karina Milei no tienen nada que ocultar sobre la megaestafa $LIBRA, ¿por qué no se avanza con el funcionamiento de la comisión investigadora?", se preguntó la diputada de UP, Paula Penacca. Quedaron volver a discutirlo la semana que viene, porque las calles se iban poblando de manifestantes que tenían sus intereses puestos en los otros puntos del temario.
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La marcha de los jubilados se convirtió en un símbolo de la resistencia a Milei. Por eso, desde el movimiento feminista Ni Una Menos, los científicos, los médicos y hasta quienes viene reclamando por la emergencia en discapacidad decidieron unir sus luchas frente al Congreso junto a ellos, al mismo tiempo que se desarrollaba la sesión. "La calle nos exige", sostuvo Victoria Tolosa Paz, que actuó como informante del dictamen de mayoría para aumentar las jubilaciones, que era de Unión por la Patria. Hizo falta un trabajo de orfebre con las bancadas de Encuentro Federal y de Democracia para Siempre para introducir las modificaciones que dejaran conformes a todos. El texto final fue aprobado por 142 votos contra apenas 67 negativos y 19 abstenciones.
Hubo hechos novedosos: por primera vez, tres diputados tucumanos que responden al gobernador Osvaldo Jaldo votaron en contra del oficialismo. Tampoco es habitual que lo hagan las salteñas Pamela Caletti y Yolanda Vega, de Innovación Federal; y la sanjuanina Nancy Picón Martínez. Entre las abstenciones, hubo nueve diputados del Pro que responden a Mauricio Macri como María Eugenia Vidal y Silvia Lospennato. Marca una primera división con los 22 que votaron en contra, varios de ellos con un pie y medio en las filas libertarias.
En varios pasajes del debate se mencionó la increíble participación de la diputada libertaria Juliana Santillán en un debate televisivo con residentes del Garrahan en el que les aseguró que la canasta básica para una familia era de 360 mil pesos por mes, confundiendola con la canasta para una persona. Fue utilizada como ejemplo de la distancia que tiene el oficialismo con las penurias que atraviesa la gente por las brutales medidas de ajuste. El diputado Carlos Heller, encargado de cerrar el debate, planteó que en Unión por la Patria no eran hinchas del déficit fiscal, como se insistió en cada intervención del oficialismo y sus aliados, pero que sí se consideraban enemigos del ajuste como solución a los problemas de la economía.
Tan picante venía la mano contra el Gobierno que UP también consiguió que aprobaran la prórroga de la moratoria previsional, que venció en marzo pasado, por otros dos años. Dentro del bloque había dudas acerca de si conseguirían acompañamiento, pero el proyecto fue votado por 111 diputados contra 100 que se inclinaron por el rechazo. Aquí volvieron a votar a favor los diputados de Tucumán, Salta y San Juan que hasta este miércoles venían acompañando al oficialismo.
Ya en la madrugada, también consiguió la aprobación la declaración de la emergencia en discapacidad en todo el país con 148 votos afirmativos, 71 negativos y 3 abstenciones. En definitiva, la idea que dejó la progresión de las votaciones fue que esta vez no le resultará tan sencillo al Ejecutivo conseguir el tercio de 86 diputados para asegurar el veto que anticipó Milei, en caso de que las iniciativas sean aprobadas por el Senado. La actitud de algunos gobernadores -los casos de Córdoba, Tucumán, Salta, San Juan- hacen ver que los repetidos incumplimientos del Gobierno comenzaron a tener consecuencias en sus apoyos.
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