La presentación de un proyecto de ley en la Legislatura de Santa Cruz generó un fuerte rechazo por parte de gremios docentes y sectores vinculados a la defensa de los derechos laborales. La propuesta, firmada por los diputados del bloque Por Santa Cruz, Fabiola Loreiro, Santiago Aberastain, José Luis Quiroga y Cristian Ojeda, estipula limitar las manifestaciones sociales en las cercanías de escuelas públicas y privadas durante el horario escolar.
El proyecto, que lleva por título “Ley de Protección del Entorno Escolar y del Derecho a la Educación sin Interferencias”, fija la prohibición de realizar protestas, concentraciones o cualquier tipo de acción que genere “ruidos molestos” —incluyendo megáfonos, bombos y altoparlantes— en un radio de hasta 200 metros de cualquier institución educativa. Además, propone sanciones para quienes no respeten la normativa, que van desde apercibimientos y multas hasta la suspensión de permisos para organizaciones reincidentes.
Avanza el disciplinamiento social en la era Milei
La autoridad de aplicación será el Poder Ejecutivo provincial, en coordinación con el Ministerio de Seguridad y el Consejo Provincial de Educación, que podrán pedir la intervención de fuerzas de seguridad para hacer cumplir la ley. En redes sociales, los docentes se pronunciaron en contra la propuesta por considerarla un intento de disciplinamiento de la protesta legítima en un contexto en que las demandas salariales aumentan.
La noticia se dio a conocer luego de las numerosas denuncias que la Asociación Docentes de Santa Cruz (ADOSAC) publicó por la falta de mantenimiento de numerosas escuelas en la provincia. A su vez, hubo sentadas y acampes estudiantiles en varios colegios secundarios por falta de calefacción.
Uno de esos casos, según consignó La Izquierda Diario, fue el Colegio Secundario 45, en la localidad de Pico Truncado, donde docentes y estudiantes realizaron un acampe afuera del edificio, protestando por la falta de calefacción y sufrieron un intento de desalojo durante la madrugada del martes 11 de junio pasado, por parte de la Policía de Santa Cruz.
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