Este miércoles se da inicio, en el Tribunal N° 2 de Campana, al juicio contra el empresario Claudio Contardi acusado por su ex pareja, la modelo y conductora Julieta Prandi, de haberla violado de forma reiterada durante más de tres años de relación. A minutos de que se inicie la primera audiencia, donde la víctima será quien inicie las declaraciones ante los jueces, expresó su confianza en el Poder Judicial y pidió justicia y seguridad para ella y su familia. El acusado llega al proceso en libertad y con tobillera electrónica, luego de amenazarla de muerte en repetidas ocasiones.
"Estoy aliviada y angustiada, pero con la necesidad de hablar. Es el fin de un calvario ya. Es horrible esto pero es muy necesario, esperé mucho tiempo para que llegara este momento. Confío en que me escuchen, den a lugar y que se haga justicia. Confío en mis abogados, en el equipo de Burlando y en que los jueces van a escuchar la verdad y van a hacer su trabajo", comenzó la conductora ante la prensa.
Ante la consulta sobre si teme por su seguridad personal, Prandi no dudó en afirmarlo y aseguró que se fue de su casa amenazada de muerte tras la violencia psicológica, física y sexual sufrida. "De esa persona espero cualquier cosa, por eso pedí medidas de seguridad para mí y para mi familia", expresó. En esa línea, aseguró que se preparó para el juicio "con amor" y junto a sus seres queridos, que también darán testimonio.
"Estoy fuerte y lista, lo que no quiere decir que yo no esté rota porque a mí ya me rompieron. Tampoco quiere decir que yo no busque y no vaya a encontrar justicia. Estos últimos meses fueron con mucho tratamiento, psicólogos, psiquiatras, medicación y contención", añadió.
Uno de sus abogados, parte del equipo de Fernando Burlando, aseguró que está pedido que el acusado no esté presente cuando Julieta declare y que lo volverán a solicitar ante los jueces. "Vamos a exigir que el Tribunal adopte todas las medidas que sean imprescindibles para garantizar su seguridad, la de su familia y que ella esté lo mejor posible. Había una perimetral de 300 metros pero él ahora llega en libertad al proceso y tiene derecho a estar presente en el juicio", manifestó.
Asimismo, la conductora mostró su deseo de que el juicio "allane el camino" para las demás víctimas y que "deje de haber tantos pasos para que una pueda contar su historia y conseguir justicia" ante un caso de abuso y violencia. "Son demasiados los pasos que tenemos que soportar, la espera, la revictimización, volver a contar y volver a contar, pasar por pericias... Y sin embargo, el victimario tiene el derecho y la garantía de decir que no declara, que no se hace las pericias", lanzó claramente afectada.
Si bien se creía que Contardi iba a enfrentar el proceso bajo prisión domiciliaria, la querella confirmó que esto no será así. La calificación legal por los delitos denunciados es "abuso sexual con acceso carnal agravado por haber causado un grave daño a la salud mental" de la víctima y la pena en expectativa, según indicó su abogado, es de 8 a 50 años de prisión. "Hay mujeres que no se atreven a denunciar porque en la misma comisaría a veces te mandan de vuelta a tu casa, les dicen 'ya se le pasó la borrachera a tu marido, volvé' y las vuelven a cagar a trompadas. No sé si son otros tiempos, pero tengo la esperanza de que sí y de que empecemos a abrir un poquito esa puerta. Las mujeres tenemos todas las que perder en esto, a las que nos matan es a nosotras", agregó la modelo.
"Mis hijos están muy bien. El más grande siente orgullo, y el más chiquito lo comprende y está contento de que yo finalmente pueda hablar. Pero no deja de ser algo que los moviliza muchísimo... No me preguntan por él, no lo llaman más 'papá', hace años que no lo quieren ver ni lo llaman así. Ellos sufrieron muchas cosas también. Estoy aliviada porque quiero hablar. Quiero contar todo lo que tengo, son muchos años. No fui esclava en la literalidad de la palabra, con una cadena y un candado no pero es lo único que me faltó", sentenció.
"Dilatan el juicio": denuncian la estrategia de la defensa
Javier Baños, abogado de Prandi, se presentó ante la prensa dos horas más tarde y se mostró enojado por un nuevo planteo dilatorio realizado por la defensa, "que no tiene gollete por ningún lado" según indicó. "Hace cinco años que Julieta está sufriendo este calvario judicial, esta cuestión que están planteando fue oportunamente resuelta hace un año. En ese momento, la defensa pidió que sea juzgado por un tribunal ordinario, nosotros nos opusimos y planteamos la inconstitucionalidad. Se litigó en la audiencia y el tribunal resolvió dándole la razón a la defensa: aceptaron que sea ante un tribunal ordinario y ahora, 24 horas antes del inicio, cambian el defensor para pedir que se suspenda el debate", lanzó.
"Aparecen con una nueva defensa particular, quieren apartar al defensor oficial y hacen un planteo extemporáneo y absurdo diciendo que ahora quiere ser juzgado por un tribunal popular. El defensor oficial cumple con su trabajo, ¿qué voy a decir? Estoy indignado, hace cinco años que estamos con esto. Una cosa es una defensa correcta, haciendo los planteos que corresponden y otra es sentar cuestiones absurdas para dilatar un proceso que tiene que empezar", denunció el letrado.
Actualmente, el proceso se encuentra en cuarto intermedio para resolver lo presentado. "Pedí expresamente la colocación de un biombo para que no haya contacto visual... Julieta no pudo entrar a la sala de audiencias porque está él ahí y no lo ponen", dijo molesto. En este contexto, el Tribunal se encuentra resolviendo las medidas cautelares de protección, que pueda entrar la conductora y el imputado vaya a una sala contigua y la presentación de la defensa. "Julieta está muy angustiada, la vi mal. Ella quiere estar en el juicio. No voy a permitir que esté adelante de la persona que la martirizó y la victimizó durante años", agregó.
Luego de la exposición de las partes, Baños opinó que los jueces deberían rechazar la nulidad presentada.